Expuesta, ...

Salmo 26: 1/3 SEÑOR, júzgame y date cuenta de que he llevado una vida honesta y que siempre he confiado en el SEÑOR. 2SEÑOR, examina mis sentimientos y pon a prueba mis pensamientos más profundos a fin de quitar la impureza de mi corazón. 3Nunca olvido el fiel amor que me tienes; tu fidelidad guía mis pasos. PDT.

... está ante ti Oh Dios, mi integridad; esto es mi mente-anima-, mi corazon en el que tu reinas, tu reinado del que soy el mas humilde de tus siervos; siervo, en el cumplimiento del plan de vida del que soy parte; porque me has hecho parte del plan que "cobija" al reino tu exaltada, benevolente y misericordiosa Voluntad; someto mi amor a tu Soberana Santidad, que hace de Tu Justicia el precioso vinculo en que el estamos unidos por Amor, El Amor que eres Tu mismo, absoluto en fidelidad y Único capaz de limpiar la impureza que pudiera afectar mi corazón; el corazón que aquilata y filtra cada pensamiento en la profundidad de mi conciencia que Tu conoces íntimamente.

1 de Crónicas 28: 9 9»Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele de todo *corazón y con buena disposición, pues el Señor escudriña todo corazón y discierne todo pensamiento. Si lo buscas, te permitirá que lo encuentres; si lo abandonas, te rechazará para siempre. NBD.
 
Quienes son los quebrantados y jadeantes de Amor que "pueden" armonizar con su Padre, para suplicarle; examíname, escudriña mi mente-anima, para encontrar el daño que hayan podido causar las maquinaciones "virtuales del esclavizador", los pensamientos que tratan de anidarse en la mente, para incursionar en el corazon, tratando de llenar Tu lugar con los productos perecederos del "mundo el demonio y la carne"; quienes sino, los hijos-as, nacidos para crecer en amor, el Amor del Padre que les da lugar y "quehacer" para dignificarlos como consecuencia de su servicio, de su utilidad, de su propósito, en el que siempre serán hallados conforme a la Voluntad de su Padre.
 
Lucas 13: 6/7 6Jesús les contó esta parábola: «Un hombre tenía una higuera plantada en su viñedo, y fue a ver si daba higos, pero no encontró ninguno. 7Así que le dijo al hombre que cuidaba el viñedo: “Mira, por tres años seguidos he venido a esta higuera en busca de fruto, pero nunca lo encuentro. Córtala, pues; ¿para qué ha de ocupar terreno inútilmente?” DHH.
 
Pero quienes son los que "se quebrantan" ante su orgullo, los que "decaen" ante su soberbia, realizándose en el caos de su propia deidad, la deidad que señalan como dios, a la que reclaman cínicamente por fallar en lo que se propusieron; la deidad sobre la que se descarga groseramente el odio que supura el terror, que íntimamente, profundamente decantado, es el nido de todo lo reprobable, perverso, sórdido, que conforma la conciencia, que "se cree", inviolable, invisible, impune, razones que son su único parámetro, su criterio para justificar su esterilidad, su inutilidad su despropósito, la arrogancia en que no es capaz de "hacer nada" ni por si mismo.   
 
Juan 15: 1/5  »Yo soy la vid verdadera y mi Padre es el que la cuida. 2Él corta todas mis ramas [a] que no dan fruto. [b] Poda y limpia cada rama que da fruto para que así produzca más. 3Mi mensaje ya los ha limpiado a ustedes. 4Permanezcan en mí y yo permaneceré en ustedes. Ninguna rama puede dar fruto si está sola, sino que tiene que estar unida a la vid. Igual sucede con ustedes, no pueden dar fruto si no se quedan en mí. 5»Yo soy la vid y ustedes las ramas. El que permanece en mí, y yo en él, producirá mucho fruto, pues separados de mí, ustedes no pueden hacer nada. PDT.    
 

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