Hablar
Juan 5: 28/29 28¡No se sorprendan tanto! Ciertamente, ya se acerca el tiempo en que todos los que están en las tumbas oirán la voz del Hijo de Dios 29y resucitarán. Los que hicieron el bien resucitarán para gozar de la vida eterna, y los que continuaron en su maldad resucitarán para sufrir el juicio. NTV.
Hablar es la capacidad humana de expresar ideas y sentimientos, por medio de la voz, en el idioma y formas del lenguaje en que halla sido enseñado. Se habla de lo que se aprende, de lo que viene a la imaginación, de lo que oímos a otros hablar, la lengua no cesa de moverse, no cesa de hablar.
Santiago 3: 1/2,6 1Hermanos en Cristo, no debemos tratar de ser todos maestros, pues bien sabemos que Dios juzgará a los maestros más estrictamente que a los demás. 2Todos cometemos muchas faltas. ¿Quién, entonces, es una persona madura? Sólo quien es capaz de dominar su lengua y de dominarse a sí mismo. 6Las palabras que decimos con nuestra lengua son como el fuego. Nuestra lengua tiene mucho poder para hacer el mal. Puede echar a perder toda nuestra vida, y hacer que nos quememos en el infierno . TLAD.
Madurez, según la Palabra de Dios, es quien es capaz de dominar su lengua y dominarse a si mismo. Dios enfatiza que quien habla para enseñar, será juzgado con mayor severidad, la pregunta es; ¿a que enseñanza, se esta refiriendo El Creador? ¿A la enseñanza sobre matemáticas, que por cierto es ciencia exacta. O tal vez a la enseñanza sobre historia?.
No en absoluto, Dios se refiere a la enseñanza, en la que el que habla, dice enseñar acerca de El. El juicio que vendrá sobre los maestros, es por la enseñanza, en la que quienes han hablado son ellos y no Dios; la enseñanza en que los que hablaron no reflejaron el carácter de su su creador y Señor y único maestro Cristo Jesús.
En todo caso, el juicio es para todos incluidos los que en efecto hablaron solo como instrumentos de la verdad divina, enseñando lo que Dios dice en su palabra la Biblia. He aquí como se debe entender a los que llenan el mundo con palabras que según ellos, son palabras de Dios y dicen por ejemplo; "Dios es Bueno, Dios es amor, Dios es proveedor, Dios es misericordioso, Dios es perdonador".
Una cosa es hablar de Dios y sus atributos, en especial de su Amor, y otra muy distinta, conocer a Dios que es Amor. Entonces en este punto entendemos que, cuando se habla de Dios, es porque se sabe quien es Dios y por tanto como es su carácter. Así lo primero que entendemos es que Dios no es Bueno, Dios es Justo, que el como se entiende su Amor. Hebreos 12: 5/6.
Dios en su Amor, y su justicia, y su insobornabilidad, no dejara sin castigo y sin reprensión al que lo merezca, porque si no lo hiciera, quedaría en el mas bajo nivel del carácter humano, que es el reconocido amor que consiente, que se hace cómplice, típico de lo buenos y justos que éramos cuando nos movíamos, de trinchera en trinchera.
Era el tiempo en que el pecado:la culpa-, nos movía a tratar de suplir, con "amor fingido y obsequios", el abandono y la falta de atención, a todos los que merecían y requerían nuestra atención, para dedicarnos a satisfacer nuestros personales y egoístas apetitos y supuestas necesidades.
Siempre llama mi atención escuchar en todos lo medios de comunicación, a hombres y mujeres que "hablan sin cesar", del amor y de lo bueno que es Dios, pero sin mencionar la justicia de Dios, que opera en el marco del bien y del mal, que se entiende en la santidad de Dios y que toma forma para la humanidad, en el pecado.
Esta forma de "enseñanza". es la que se expresa desde la simple naturaleza humana, y es lo que Dios llama falsa enseñanza, falsa predicación, falso evangelio, falsa palabra de dios. Toda enseñanza legitima en la que Dios es quien enseña, debe empezar en lo absoluto, por la persona del hijo de Dios Cristo Jesús, que es la autoridad que juzgará, todo palabra pronunciada en su nombre.
1 de Pedro 4: 4/5,17 4No es de extrañarse que sus amigos de la vieja vida se sorprendan de que ustedes ya no participan en las cosas destructivas y descontroladas que ellos hacen. Por eso los calumnian, 5pero recuerden que ellos tendrán que enfrentarse con Dios, quien juzgará a todos, tanto a vivos como a muertos. 17Pues ha llegado el tiempo del juicio, y debe comenzar por la casa de Dios; y si el juicio comienza con nosotros, ¿qué terrible destino les espera a los que nunca obedecieron la Buena Noticia de Dios?. NTV.
Hablar es la capacidad humana de expresar ideas y sentimientos, por medio de la voz, en el idioma y formas del lenguaje en que halla sido enseñado. Se habla de lo que se aprende, de lo que viene a la imaginación, de lo que oímos a otros hablar, la lengua no cesa de moverse, no cesa de hablar.
Santiago 3: 1/2,6 1Hermanos en Cristo, no debemos tratar de ser todos maestros, pues bien sabemos que Dios juzgará a los maestros más estrictamente que a los demás. 2Todos cometemos muchas faltas. ¿Quién, entonces, es una persona madura? Sólo quien es capaz de dominar su lengua y de dominarse a sí mismo. 6Las palabras que decimos con nuestra lengua son como el fuego. Nuestra lengua tiene mucho poder para hacer el mal. Puede echar a perder toda nuestra vida, y hacer que nos quememos en el infierno . TLAD.
Madurez, según la Palabra de Dios, es quien es capaz de dominar su lengua y dominarse a si mismo. Dios enfatiza que quien habla para enseñar, será juzgado con mayor severidad, la pregunta es; ¿a que enseñanza, se esta refiriendo El Creador? ¿A la enseñanza sobre matemáticas, que por cierto es ciencia exacta. O tal vez a la enseñanza sobre historia?.
No en absoluto, Dios se refiere a la enseñanza, en la que el que habla, dice enseñar acerca de El. El juicio que vendrá sobre los maestros, es por la enseñanza, en la que quienes han hablado son ellos y no Dios; la enseñanza en que los que hablaron no reflejaron el carácter de su su creador y Señor y único maestro Cristo Jesús.
En todo caso, el juicio es para todos incluidos los que en efecto hablaron solo como instrumentos de la verdad divina, enseñando lo que Dios dice en su palabra la Biblia. He aquí como se debe entender a los que llenan el mundo con palabras que según ellos, son palabras de Dios y dicen por ejemplo; "Dios es Bueno, Dios es amor, Dios es proveedor, Dios es misericordioso, Dios es perdonador".
Una cosa es hablar de Dios y sus atributos, en especial de su Amor, y otra muy distinta, conocer a Dios que es Amor. Entonces en este punto entendemos que, cuando se habla de Dios, es porque se sabe quien es Dios y por tanto como es su carácter. Así lo primero que entendemos es que Dios no es Bueno, Dios es Justo, que el como se entiende su Amor. Hebreos 12: 5/6.
Dios en su Amor, y su justicia, y su insobornabilidad, no dejara sin castigo y sin reprensión al que lo merezca, porque si no lo hiciera, quedaría en el mas bajo nivel del carácter humano, que es el reconocido amor que consiente, que se hace cómplice, típico de lo buenos y justos que éramos cuando nos movíamos, de trinchera en trinchera.
Era el tiempo en que el pecado:la culpa-, nos movía a tratar de suplir, con "amor fingido y obsequios", el abandono y la falta de atención, a todos los que merecían y requerían nuestra atención, para dedicarnos a satisfacer nuestros personales y egoístas apetitos y supuestas necesidades.
Siempre llama mi atención escuchar en todos lo medios de comunicación, a hombres y mujeres que "hablan sin cesar", del amor y de lo bueno que es Dios, pero sin mencionar la justicia de Dios, que opera en el marco del bien y del mal, que se entiende en la santidad de Dios y que toma forma para la humanidad, en el pecado.
Esta forma de "enseñanza". es la que se expresa desde la simple naturaleza humana, y es lo que Dios llama falsa enseñanza, falsa predicación, falso evangelio, falsa palabra de dios. Toda enseñanza legitima en la que Dios es quien enseña, debe empezar en lo absoluto, por la persona del hijo de Dios Cristo Jesús, que es la autoridad que juzgará, todo palabra pronunciada en su nombre.
1 de Pedro 4: 4/5,17 4No es de extrañarse que sus amigos de la vieja vida se sorprendan de que ustedes ya no participan en las cosas destructivas y descontroladas que ellos hacen. Por eso los calumnian, 5pero recuerden que ellos tendrán que enfrentarse con Dios, quien juzgará a todos, tanto a vivos como a muertos. 17Pues ha llegado el tiempo del juicio, y debe comenzar por la casa de Dios; y si el juicio comienza con nosotros, ¿qué terrible destino les espera a los que nunca obedecieron la Buena Noticia de Dios?. NTV.