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Marcos 2: 19/22 19 Jesús les dijo: «¿Acaso pueden ayunar los invitados a una boda, mientras el novio está con ellos? ¡Claro que no, mientras el novio esté presente! 20 Pero vendrá el día en que el novio les será quitado, y entonces sí, ese día ayunarán. 21 Nadie remienda un vestido viejo con un paño de tela nueva, porque la tela nueva estira la tela vieja y la rotura se hace peor. 22 Ni tampoco se echa vino nuevo en odres viejos, porque el vino nuevo revienta los odres, y entonces el vino se derrama y los odres se echan a perder. Más bien, el vino nuevo debe echarse en odres nuevos.» RVC.

... como semblanza de los seres humanos sometidos a la tiranía de calendario, incrustado en sus mentes-almas-, como plataforma de lanzamiento, para las sádicas, corruptas, influencia demoniacas, dirigidas a "conducir", la conducta que satisface el pecado, para perpetuar la muerte, objetivo fundamental de satanás, en su accionar contra ls criaturas, del Creador, sumergidas en la mentira, que les asegura tener acceso a "tiempos nuevos", luego de terminar con etapas, que les muestra agotadas, cansadas, viejas.

Juan 3: 3/5 3 Respondió Jesús y le dijo: En verdad, en verdad te digo que el que no nace de nuevo[a] no puede ver el reino de Dios. 4 Nicodemo le dijo*: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo ya viejo? ¿Acaso puede entrar por segunda vez en el vientre de su madre y nacer? 5 Jesús respondió: En verdad, en verdad te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. LBLA.

Odres viejos, milenarios, envejecidos por la práctica de su propia vejes, nacidos viejos, crecidos en la rutina de sus ancestros, haciéndose más y más viejos, engañados con cada circulo del vicio calendario, convencidos de lo viejo del "ciclo", jamás de propia ancianidad, repiten en cada fina viejo final, que "echaran vino nuevo", en su odres viejos, completamente raídos, a punto de explotar, existencias en el colmo de su consagración a la injusticia, al pecado.  

Efesios 4: 17/24 17 Esto digo, pues, y afirmo juntamente con el Señor: que ya no andéis así como andan también los gentiles, en la vanidad[a] de su mente, 18 entenebrecidos en su entendimiento, excluidos[b] de la vida de Dios por causa de la ignorancia que hay[c] en ellos, por la dureza de su corazón; 19 y ellos, habiendo llegado a ser insensibles, se entregaron a la sensualidad para cometer con avidez toda clase de impurezas. 20 Pero vosotros no habéis aprendido a Cristo[d] de esta manera, 21 si en verdad lo oísteis y habéis sido enseñados en Él, conforme a la verdad que hay[e] en Jesús, 22 que en cuanto a vuestra anterior manera de vivir, os despojéis del viejo hombre, que se corrompe según los deseos engañosos[f], 23 y que seáis renovados en el espíritu de vuestra mente, 24 y os vistáis del nuevo hombre, el cual, en la semejanza de Dios[g], ha sido creado en la justicia y santidad de la verdad. LBLA.

El trágico disparate en que se mueve la gente del mundo, obra en la consistencia de sus creencias maquinadas, manipuladas, sesgadas por satanás, sobre el "poder" del calendario de cada día, la magia, que resume, la ancestral superstición, cargada de hechicería, de espiritismo, de manipulaciones diabólicas, usando maleza-hierbas-, partes de animales, piedras, rezos sortílegos y de convocación al diablo, quiromancia, taroismo, astrología, esoterismo, rituales en los templos, con residuos de cementerio, etc.

Colosenses 3: 5/11 5 Por tanto, considerad los miembros de vuestro cuerpo terrenal como muertos[c] a la fornicación, la impureza, las pasiones, los malos deseos y la avaricia, que es idolatría. 6 Pues la ira de Dios vendrá sobre los hijos de desobediencia[d] por causa de estas cosas, 7 en las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8 Pero ahora desechad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, lenguaje soez de vuestra boca. 9 No mintáis[e] los unos a los otros, puesto que habéis desechado al viejo hombre con sus malos hábitos, 10 y os habéis vestido del nuevo hombre, el cual se va renovando hacia un verdadero conocimiento, conforme a la imagen de aquel que lo creó; 11 una renovación en la cual no hay distinción entre griego y judío, circunciso e incircunciso[f], bárbaro[g], escita[h], esclavo o libre, sino que Cristo es todo, y en todos. LBLA.

Se trata de la simple, pero infalible verdad, que explica, como los odres nuevos, son los que pueden contener el vino nuevo; tanto el odre como el vino son "nuevos", que confusión causa, la sencilla vision, en que el mundo pasa de un ciclo a otro, creyendo que, el solo deseo, porque el ciclo nuevo sea de felicidad, lo haga "feliz",  ignorantes sin remedio, sobre lo que significa esa palabra; felicidad, pero expertos milenarios en supersticiones, a las que le agregan, mágicamente, que esperan el nuevo ciclo,-¿cual?', sea feliz.   

Romanos 6: 5/11 5 Porque si fuimos plantados juntamente con él en la semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección; 6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. 7 Porque el que ha muerto, ha sido justificado del pecado. 8 Y si morimos con Cristo, creemos que también viviremos con él; 9 sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de los muertos, ya no muere; la muerte no se enseñorea más de él. 10 Porque en cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; mas en cuanto vive, para Dios vive. RVR-1960.