!! inerte ¡¡, ...
Eclesiastés 9: 1/6 A todo esto me he entregado de lleno, tan sólo para descubrir que las obras de buenos y de sabios están en las manos de Dios. Nada sabe el hombre del amor ni del odio, aun cuando los tenga ante sus ojos. 2 Al fin y al cabo, a todos les espera lo mismo: al justo y al injusto, al bueno y al malo, al puro y al impuro, al que ofrece sacrificios y al que no los ofrece; lo mismo al bueno que al pecador, al que hace juramentos y al que no los hace.
3 Esto es lo malo de todo lo que pasa en este mundo: que a todos les espera lo mismo. Por otra parte, el pensamiento del hombre está lleno de maldad; la estupidez domina su mente durante toda su vida; y al fin de cuentas, ¡al cementerio!
4 Tiene más esperanza aquel a quien se concede seguir viviendo, pues vale más perro vivo que león muerto. 5 Además, los que viven saben que han de morir, pero los muertos ni saben nada ni ganan nada, porque se les echa al olvido. 6 Allí terminan su amor, su odio y sus pasiones, y nunca más vuelven a tomar parte en nada de lo que se hace en este mundo. DHH.
... de modo que es inútil, en el mayor grado posible, son los templos y sus similares, la representación exacta de la desidia, el exceso de la "inversion humana", en estancias que no cumplen con objetivo, o propósito que beneficie efectivamente a nadie, principalmente a los que los erigen, pues lo marmoleo de las estructuras, el frio que refleja la muerte, no puede ser influido, o cambiado, porque los ocupantes, participan del mismo frio, de la muerte, y se reúnen. únicamente a celebrar ese estado eterno.
Marcos 12: 24/27 24 Jesús les contestó: —Ustedes están equivocados, porque no conocen las Escrituras ni el poder de Dios. 25 Cuando los muertos resuciten, los hombres y las mujeres no se casarán, pues serán como los ángeles que están en el cielo. 26 Y en cuanto a que los muertos resucitan, ¿no han leído ustedes en el libro de Moisés el pasaje de la zarza que ardía? Dios le dijo a Moisés: “Yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.” 27 ¡Y él no es Dios de muertos, sino de vivos! Ustedes están muy equivocados. DHH.
Pasivos, inanimados, enclavados en los lugres que las manos de los constructores, los edificaron, su presencia es ocasional, y sucede cuando los visitantes, llegan y llenan sus espacios vacíos, sin sentido, alarmantemente desocupados, porque esas ingentes multitudes, piden que los dioses los visiten, que los espíritus los visiten, que los sobrenatural los visite, que cualquier cosa los visite, tratando de encontrar algo de "calor", que atenué el frio de la muerte que los sobrecoge.
Hebreos 2: 12/15 11 Tanto Jesús, que nos santifica, como nosotros, que somos los santificados, tenemos un mismo origen. Por ello, Jesús no se avergüenza de llamarnos hermanos, 12 cuando dice: «Hablaré de ti a mis hermanos y juntos te cantaremos alabanzas». 13 Y en otra parte dice: «Confiaré en Dios». Y añade: «Aquí estoy, con los hijos que Dios me ha dado». 14 Por consiguiente, ya que los hijos de Dios son de carne y hueso, Jesús también compartió esa misma naturaleza de carne y hueso, para así anular, por medio de su muerte, al que tiene el dominio de la muerte, al diablo, 15 y poder librar a los que vivían siempre en esclavitud por temor a la muerte. NBV.
Lo inerte es inmóvil, y en su inmovilidad, se erosiona, se corroe, se hunde poco a poco hasta hacerse parte del "suelo", en que fue puesto, de manera que en cambio de ser instrumento de poder y cambio para los edificadores, vienen a ser una enorme carga, para sus depósitos de "dinero", dada esta realidad, los convierten en medio para hacer negocios, que les permita recuperar, lo que "gastan", en evitar que se derrumben, así es como somos testigos, de como los templos, son el principal medio para realizar el negocio religioso.
Mateo 7: 24/27 24 »Por lo tanto, quien oiga mis enseñanzas y las ponga en práctica, será como el hombre prudente que construyó su casa sobre la roca. 25 Llovió fuerte, los ríos crecieron, los vientos soplaron y golpearon contra aquella casa. Sin embargo, la casa no se cayó porque estaba construida sobre la roca. 26 Pero el que oiga mis palabras y no las ponga en práctica, será como el insensato que construyó su casa sobre arena. 27 Llovió fuerte, los ríos crecieron, los vientos soplaron y golpearon contra la casa. La casa se derrumbó y fue todo un desastre». PDT.
Vivo es el contraste de muerto, es decir de lo inerte, y vivo es el templo en que Dios habita, pues Dios es Vida, y su Habitación, ha de ser tibia, tierna, temerosa, reverente, humilde, sumisa, entregada por completo, a ser la dinámica de la vida, la edificación de vida, con vida, de personas a persona, de diseñar, bajo la guia y el Poder del Creador, el derrotero, en que los niños, han de ser los templos en que su Creador viva, como obra en la que los constructores, despliegan todo el Amor, recibido, la tibieza de la vida, la Presencia de Dios.
1 de Corintios 3: 15/20 16 ¿Acaso no saben ustedes que son templo de Dios, y que el Espíritu de Dios vive en ustedes? 17 Si alguno destruye el templo de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el templo de Dios es santo, y ese templo son ustedes mismos. 18 Que nadie se engañe: si alguno de ustedes se cree sabio según la sabiduría de este mundo, vuélvase como un ignorante, para así llegar a ser verdaderamente sabio. 19 Pues la sabiduría de este mundo es pura tontería para Dios. En efecto, la Escritura dice: «Dios atrapa a los sabios en la propia astucia de ellos.» 20 Y dice también: «El Señor sabe que los pensamientos de los sabios son tonterías.» DHH.