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1 de Corintios 15: 21/25 21 Así que, ya ven, tal como la muerte entró en el mundo por medio de un hombre, ahora la resurrección de los muertos ha comenzado por medio de otro hombre. 22 Así como todos mueren porque todos pertenecemos a Adán, todos los que pertenecen a Cristo recibirán vida nueva; 23 pero esta resurrección tiene un orden: Cristo fue resucitado como el primero de la cosecha, luego todos los que pertenecen a Cristo serán resucitados cuando él regrese. 24 Después de eso, vendrá el fin, cuando él le entregará el reino a Dios el Padre, luego de destruir a todo gobernante y poder y toda autoridad. 25 Pues Cristo tiene que reinar hasta que humille a todos sus enemigos debajo de sus pies. NTV.

... el parentesco de la gente con Adán, termina el reinado de la muerte, causada por el pecado imperdonable de la idolatría, adulterio espiritual, desaparece la neutralidad en que los seres humanos, no mas que eso, la enorme masa que llena el mundo, sin identidad, ignorante de su porqué, y para qué "en el mundo", dislocados mentales-almas-, aventurando posibilidades, para si mismos, y para dios, resignados a la oscura verdad, de no contar con ejemplos, para imitar, mas allá de lo que sido, la trágica existencia, imitando a sus parientes, y a sus dioses. 

Juan 3: 1/7 Entre los fariseos había un hombre que, entre los judíos, era muy importante. Se llamaba Nicodemo. 2 Éste vino de noche a ver a Jesús, y le dijo: «Rabí, sabemos que has venido de parte de Dios como maestro, porque nadie podría hacer estas señales que tú haces si Dios no estuviera con él.» 3 Jesús le respondió: «De cierto, de cierto te digo, que el que no nace de nuevo, no puede ver el reino de Dios.» 4 Nicodemo le dijo: «¿Y cómo puede un hombre nacer, siendo ya viejo? ¿Acaso puede entrar en el vientre de su madre, y volver a nacer?» 5 Jesús le respondió: «De cierto, de cierto te digo, que el que no nace de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. 6 Lo que nace de la carne, carne es; y lo que nace del Espíritu,[a] espíritu es. 7 No te maravilles de que te dije que es necesario que ustedes nazcan de nuevo. RVC.

Los parentescos de sangre y de carne, no pueden, establecer lazos de amistad, de afinidad, de comunión, de intimidad, pues la muerte es por inherencia, la soledad extremas, inmóvil, inoperante, de la que solo se puede observar corrupción, acelerada, en dirección a la consumación de la Justicia de Dios, que sucederá en el infierno, pero que mientras ocurre la transición, contaminan con su pestilencia, a los que comienzan su acelerado proceso de descomposición, claro se trata de los niños.

Mateo 4: 12/17 12 Cuando Jesús se enteró de que Juan estaba preso, volvió a Galilea, 13 pero se retiró de Nazaret y se estableció en Cafarnaúm, ciudad marítima en la región de Zabulón y de Neftalí, 14 para que se cumpliera lo dicho por el profeta Isaías: 15 «Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí, Camino del mar, al otro lado del Jordán, Galilea de los gentiles; 16 El pueblo asentado en tinieblas vio gran luz; a los que vivían en región de sombra de muerte, les resplandeció la luz.» 17 Desde entonces Jesús comenzó a predicar, y decía: «Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado.» RVC.

La muerte como respuesta a la Justicia de Dios, ante el pecado de sus criaturas, no se "disolvió", dentro del mismo concepto de muerte, como sucede con los animales, porque las criaturas fueron creadas y imagen y semejanza del Creador, y vivas son participes de la vida, como El Padre es Vida, pero muertas, subyace, la Mano de Dios, en su Obra que impide la supuesta finalización del "ser", porque al morir, queda establecido el parentesco con Adán, y con El la eternidad en ese estado, sin vida: la muerte. 

Marcos 8: 31/35 31 Jesús comenzó entonces a enseñarles que era necesario que el Hijo del Hombre sufriera mucho y fuera desechado por los ancianos, los principales sacerdotes y los escribas, y que tenía que morir y resucitar después de tres días. 32 Esto se lo dijo con toda franqueza. Pero Pedro lo llevó aparte y comenzó a reconvenirlo. 33 Entonces Jesús se volvió a ver a los discípulos, y reprendió a Pedro. Le dijo: «¡Aléjate de mi vista, Satanás! ¡Tú no piensas en las cosas de Dios sino en cuestiones humanas!» 34 Luego llamó a la gente y a sus discípulos, y les dijo: «Si alguno quiere seguirme, niéguese a sí mismo, tome su cruz, y sígame. 35 Porque todo el que quiera salvar su vida, la perderá, y todo el que pierda su vida por causa de mí y del evangelio, la salvará. RVC.     

El hombre creado a la imagen y semejanza de su Creador, y Dios, y Padre, murió, y el Unigénito del Padre, hecho hombre, vivió entre los hombres, hizo presencia de Dios sobre al tierra, como ejemplo, ante los seres humanos que habitan  en las regiones celestes, su ejemplo de Vida, resulto ser el perfecto contraste con la existencia muerta, y la culminación de los siglos, sucedió, cunado la vida, en efecto murió, para restaurar la vida en las criaturas, que sean capaces por su disposición de corazón, de pasar de muerte a vida. 

Hebreos 2: 14/16 14 Debido a que los hijos de Dios son seres humanos—hechos de carne y sangre—el Hijo también se hizo de carne y sangre. Pues solo como ser humano podía morir y solo mediante la muerte podía quebrantar el poder del diablo, quien tenía[a] el poder sobre la muerte. 15 Únicamente de esa manera el Hijo podía libertar a todos los que vivían esclavizados por temor a la muerte. 16 También sabemos que el Hijo no vino para ayudar a los ángeles, sino que vino para ayudar a los descendientes de Abraham. NTV.

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