!!! Mayordomía !!!, ...
1 de Pedro 1: 14/21 14 Pórtense como hijos obedientes, y no sigan los dictados de sus anteriores malos deseos, de cuando vivían en la ignorancia. 15 Al contrario, vivan una vida completamente santa, porque santo es aquel que los ha llamado. 16 Escrito está: «Sean santos, porque yo soy santo.»(A) 17 Si ustedes llaman «Padre» a aquel que al juzgar se fija en lo que se ha hecho, y no en quién lo hizo, vivan el resto de sus vidas en el temor de Dios. 18 Ustedes saben que fueron rescatados de una vida sin sentido, la cual heredaron de sus padres; y que ese rescate no se pagó con cosas corruptibles, como el oro y la plata, 19 sino con la sangre preciosa de Cristo, sin mancha y sin contaminación, como la de un cordero, 20 que ya había sido destinado desde antes de que Dios creara el mundo, pero que se manifestó en estos últimos tiempos por amor a ustedes. 21 Por él ustedes creen en Dios, que fue quien lo resucitó de los muertos y lo ha glorificado, para que ustedes tengan puesta su fe y su esperanza en Dios. RVC.
... es en el mejor de los casos, una practica religiosa, que los seres humanos religiosos, repudian con idolátrica avaricia, dentro de sus grupos fanáticamente amados, en lo que les gusta oír, pero rechazados en este aspecto, completamente endurecidos, buscando incesantemente argumentos para evitar, la entrega de las misérrimas, cantidades, que "aportan", resultado de operaciones aritméticas, prescritas por la ley, pero que desconocen, por cierto, los hechos del Padre de la fe Abraham, al encontrarse con Melquisedec.
Génesis 14: 17/24 17 Cuando Abram regresó, después de haber derrotado a Quedorlaómer y a los reyes que estaban de su parte, el rey de Sodoma salió a recibirlo al valle de Savé, que es el Valle del Rey. 18 También Melquisedec, que era rey de Salem y sacerdote del Dios altísimo, sacó pan y vino 19 y bendijo a Abram con estas palabras: «Que te bendiga el Dios altísimo, creador del cielo y de la tierra; 20 y alabado sea el Dios altísimo que te hizo vencer a tus enemigos.» Entonces Abram le dio a Melquisedec la décima parte de lo que había recobrado. 21 Luego el rey de Sodoma le dijo a Abram: —Dame las personas y quédate con las cosas. 22 Pero Abram le contestó: —Le he jurado al Señor, al Dios altísimo que hizo el cielo y la tierra, 23 que no voy a tomar nada de lo que es tuyo, ni siquiera un hilo o una correa para mis sandalias, para que nunca digas que tú fuiste el que me hizo rico. 24 Yo no quiero nada para mí, excepto lo que ya comieron los criados. En cuanto a los hombres que me acompañaron, es decir, Aner, Escol y Mamré, ellos tomarán su parte. DHH.
El sistema religioso encubre, pero a su vez presiona a sus miembros, para que aporten a la empresa religiosa, que tiene como único y ulterior objetivo, acabar con la familia de Dios que Cristo Jesús dejo establecida como Iglesia, mentira que se presenta en cambio, como certeza, que los "miembros" ejercen reclamando promesas, bendiciones misericordias, muy bien pronunciadas desde el antiguo Testamento, ignorantes de su estado completamente infiel, con su grupo religioso, pero principalmente con quien creen es dios.
Lucas 18: 9/13 9 A unos que a sí mismos se consideraban justos y menospreciaban a los demás, Jesús les dijo esta parábola: 10 «Dos hombres fueron al templo a orar: uno de ellos era fariseo, y el otro era cobrador de impuestos. 11 Puesto de pie, el fariseo oraba consigo mismo de esta manera: “Dios mío, te doy gracias porque no soy como los demás, que son ladrones, injustos y adúlteros. ¡Ni siquiera soy como este cobrador de impuestos! 12 Ayuno dos veces a la semana, y doy la décima parte de todo lo que gano.” 13 Pero el cobrador de impuestos, desde lejos, no se atrevía siquiera a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: “Dios mío, ten misericordia de mí, porque soy un pecador.” RVC.
La formula sencilla, que Cristo Jesús, expone para explicar que significa en realidad "ser cristiano", se explica en la comprensión de la autoridad a la que obedece la gente, obediencia que describe su conducta, su manera de existir o de vivir, la gente gobernada por satanás, engañada, cree ser dueña de su éxito y de su prosperidad, esto es, la gente cree ser amo y no mayordomo, es por tanto, practicante del pecado imperdonable de idolatría-avaricia-, en tanto proclama que dios, y todos sus sinónimos, cumple en ellos sus promesas.
Gálatas 6: 6/10 6 El que recibe instrucción en el mensaje del evangelio, debe compartir con su maestro toda clase de bienes. 7 No se engañen ustedes: nadie puede burlarse de Dios. Lo que se siembra, se cosecha. 8 El que siembra en los malos deseos, de sus malos deseos recogerá una cosecha de muerte. El que siembra en el Espíritu, del Espíritu recogerá una cosecha de vida eterna. 9 Así que no debemos cansarnos de hacer el bien; porque si no nos desanimamos, a su debido tiempo cosecharemos. 10 Por eso, siempre que podamos, hagamos bien a todos, y especialmente a nuestros hermanos en la fe. DHH.
Cristo Jesús, confronta; ¿sus proclamaciones, y mensajes muy elocuentes, sus testimonios acerca de que Yo los bendigo, sus incesantes voces acerca de lo bueno que es dios, son fruto de la relación que nació, entre ustedes y Yo, después de morir en la cruz, como mayordomos de satanás, es decir mayordomos religiosos, para ser hechos parte de Mi familia, en la que cada minuto de vida que compré con Mi sangre, y cada centavo que pongo en sus manos, es usado al ciento por ciento, en la edificación de esa familia, que es la iglesia?
Romanos 6: 3/10 3 ¿No saben ustedes que, al quedar unidos a Cristo Jesús en el bautismo, quedamos unidos a su muerte? 4 Pues por el bautismo fuimos sepultados con Cristo, y morimos para ser resucitados y vivir una vida nueva, así como Cristo fue resucitado por el glorioso poder del Padre. 5 Si nos hemos unido a Cristo en una muerte como la suya, también nos uniremos a él en su resurrección. 6 Sabemos que lo que antes éramos fue crucificado con Cristo, para que el poder de nuestra naturaleza pecadora quedara destruido y ya no siguiéramos siendo esclavos del pecado. 7 Porque, cuando uno muere, queda libre del pecado. 8 Si nosotros hemos muerto con Cristo, confiamos en que también viviremos con él. 9 Sabemos que Cristo, habiendo resucitado, no volverá a morir. La muerte ya no tiene poder sobre él. 10 Pues Cristo, al morir, murió de una vez para siempre respecto al pecado; pero al vivir, vive para Dios. DHH.