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Santiago 3: 13/18 13 ¿Quién es sabio y entendido entre ustedes? Que lo demuestre con su buena conducta, mediante obras hechas con la humildad que le da su sabiduría. 14 Pero, si ustedes tienen envidias amargas y rivalidades en el corazón, dejen de presumir y de faltar a la verdad. 15 Esa no es la sabiduría que desciende del cielo, sino que es terrenal, puramente humana y diabólica. 16 Porque donde hay envidias y rivalidades, también hay confusión y toda clase de acciones malvadas. 17 En cambio, la sabiduría que desciende del cielo es ante todo pura, y además pacífica, bondadosa, dócil, llena de compasión y de buenos frutos, imparcial y sincera. 18 En fin, el fruto de la justicia se siembra en paz para[a] los que hacen la paz. NVI. 

... sospecha, duda, relaciones puramente emocionales, que causan acercamientos impredecibles, inconsistencia de carácter, que frustra los genuinos intentos, tímidos, como forma de superar las barreras, que imponen las gentes, para evitar a quienes podrían acercarse, formulando la manera corriente-común-, de llevar adelante los obligatorios "encuentros", para cumplir con sus motivaciones, en el ámbito de la incertidumbre, de cada quien, sobre como, de que manera, haciendo que, evitara el rechazo que es normal en los seres humanos.  

Santiago 1: 5/8 5 Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará; pues Dios da a todos sin limitación y sin hacer reproche alguno. 6 Pero tiene que pedir con fe, sin dudar nada; porque el que duda es como una ola del mar, que el viento lleva de un lado a otro. 7 Quien es así, no crea que va a recibir nada del Señor, 8 porque hoy piensa una cosa y mañana otra, y no es constante en su conducta. DHH. 14 y no atiendan a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad. 15 Para los puros, todas las cosas son puras; pero para los corruptos e incrédulos nada es puro, pues hasta su mente y su conciencia están corrompidas; 16 dicen conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, pues son odiosos y rebeldes, reprobables en cuanto a toda buena obra. Tito 1: 14/16 RVC. 

La caótica conducta humana, explica la inundación impredecible de las mentes-almas-, aguijoneadas por las tinieblas, para conseguir que la infidelidad comience por si mismos, fructificando en que, nadie en absoluto, reciba fidelidad de nadie, pues lo que uno jura en este instante, al siguiente instante lo traiciona, abriendo el muy antiguo panorama, en que los seres humanos, obran en fascinación por el engaño, la mentira, que es el poder del carácter odioso, orgulloso del padrastro, que los destruye.  

Efesios 2: 1/3 1Hace tiempo ustedes estaban espiritualmente muertos a causa de sus pecados y sus ofensas contra Dios. 2 Vivían en pecado, igual que el resto de la gente, obedeciendo al diablo—el líder de los poderes del mundo invisible[a]—, quien es el espíritu que actúa en el corazón de los que se niegan a obedecer a Dios. 3 Todos vivíamos así en el pasado, siguiendo los deseos de nuestras pasiones y la inclinación de nuestra naturaleza pecaminosa. Por nuestra propia naturaleza, éramos objeto del enojo de Dios igual que todos los demás. PDT/NTV. 

La armónica, uniforme, sólida, consistente, manera de realizarse las personas, es fruto de su identidad espiritual, en ejercicio de la autoridad que han recibido, al ser hechos parte de la Naturaleza Divina, que Jamás cambia, y que ellos, comprueban por la forma como son cuidados, proveídos, guiados, siempre, capacitados para dominar, el caos de sus mentes-almas-, entendidos del truco de las emociones, los sentimientos, las circunstancias, los caos fortuitos, del coas demoniaco en que existen la gentes.

Job 36: 5/15 5 Dios es poderoso y no vacila, poderoso y de firmes decisiones. 6 No permite que viva el malvado, sino que hace justicia al afligido; 7 no aparta sus ojos de los justos: los pone junto a reyes, en sus tronos, los entroniza y exalta para siempre. 8 Pero si Dios los carga de cadenas y los ata con sogas de aflicción, 9 es para denunciar sus acciones, sus delitos nacidos del orgullo; 10 hace que ellos escuchen su advertencia, los conmina a dejar el pecado. 11 Si escuchan y saben ser dóciles, su vida se colmará de prosperidad, el bienestar acompañará su existencia; 12 si no escuchan, cruzarán el Canal; morirán repletos de ignorancia. 13 La mente del impío almacena cólera, cuando Dios lo encadena no pide socorro; 14 su vida se consume en plena juventud, muere a la edad de los hieródulos. 15 Pero salva al afligido con la aflicción, lo instruye mediante el sufrimiento. BLP.

la caótica tensión, la malicia, que acecha toda acción, de cada uno de los seres humanos, la duda que abre las sospechas acerca de lo que tienen en mente-alma-, los que los rodean, le dan forma a la inenarrable gigante actividad humana que se conoce como pecado-injusticia-, es infernal, la "normalidad angustiosa" de los niños, que escuchan decir, te amo, porque les han tendido emboscadas centradas en los vientres y los bajos vientres, de los que lo dicen; son estos niños, los que corrompidos, por el "te amo", corromperán a los suyos.  

1 de Juan 3: 7/10 7 Hijitos, no se dejen engañar: el que practica la justicia es justo, como Jesús es justo. 8 El que practica el pecado pertenece al diablo, porque el diablo comenzó a pecar desde el principio. Pero el Hijo de Dios vino a destruir las obras del diablo. 9 El que ha nacido de Dios no practica el pecado, porque la vida de Dios está en él; no puede vivir entregado al pecado porque ha nacido de Dios. 10 Uno puede saber quién es hijo de Dios y quién es hijo del diablo. El que no practica la justicia ni ama a su hermano demuestra que no es hijo de Dios. NBV.