!! calcular !!, ...
Isaías 65: 1/8 1El Señor dice: «Estaba listo para responder, pero nadie me pedía ayuda; estaba listo para dejarme encontrar, pero nadie me buscaba. “¡Aquí estoy, aquí estoy!”, dije a una nación que no invocaba mi nombre.[a] 2 Todo el día abrí mis brazos a un pueblo rebelde.[b] Pero ellos siguen sus malos caminos y sus planes torcidos. 3 Todo el día me insultan en mi propia cara al rendir culto a ídolos en sus huertos sagrados y al quemar incienso en altares paganos. 4 De noche andan entre las tumbas para rendir culto a los muertos. Comen carne de cerdo y hacen guisos con otros alimentos prohibidos. 5 Sin embargo, se dicen unos a otros: “¡No te acerques demasiado, porque me contaminarás!
¡Yo soy más santo que tú!”. Ese pueblo es un hedor para mi nariz; un olor irritante que nunca desaparece. 6 »Miren, tengo escrito mi decreto[c] delante de mí: no me quedaré callado; les daré el pago que se merecen. Sí, les daré su merecido, 7 por vuestras iniquidades y por las iniquidades de vuestros padres(L) juntamente dice el Señor. Porque quemaron incienso en los montes(M), y en las colinas me injuriaron(N); por tanto mediré en su seno su obra pasada(O). 8 »Pero no los destruiré a todos —dice el Señor—. Tal como se encuentran uvas buenas en un racimo de uvas malas (y alguien dice: “¡No las tires todas; algunas de ellas están buenas!”), así mismo, no destruiré a todo Israel. Pues aún tengo verdaderos siervos allí. NTV/LBLA.
... siempre calcular, acción de la naturaleza humana, que perdió la comprensión de la justicia, atributo de la vida, de modo que el egoísmo, no para de medir, una y otra vez, buscando astutamente su beneficio, calculando según sus reglas, los cinco sentidos, movilizando el cuerpo para llevarlas a efecto, manipulando los resultados del calculo a su antojo, para que los "guarismos", empleados en infantil operación, para que lo planeado resulte en daño irreparable, infligido primero a los niños y a todos los demás.
2 de Corintios 10: 12/17 12 Porque no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a sí mismos(A); pero ellos, midiéndose a sí mismos y comparándose consigo mismos, carecen de entendimiento. 13 Mas nosotros no nos gloriaremos desmedidamente, sino dentro de la medida[a] de la esfera que Dios nos señaló(B) como límite[b] para llegar también hasta vosotros. 14 Pues no nos excedemos a nosotros mismos, como si no os hubiéramos alcanzado, ya que nosotros fuimos los primeros en llegar hasta vosotros(C) con[c] el evangelio de Cristo(D);
15 no gloriándonos desmedidamente(E), esto es, en los trabajos de otros(F), sino teniendo la esperanza de que conforme vuestra fe crezca, nosotros seremos, dentro de[d] nuestra esfera, engrandecidos aún más por vosotros(G), 16 para anunciar el evangelio(H) aun a las regiones que están más allá de vosotros(I), y para no gloriarnos en lo que ya se ha hecho[e] en la esfera de otro(J). 17 Pero el que se gloría, que se gloríe en el Señor(K). LBLA.
La completamente obvia, predecible forma de moverse los seres humanos, es suficiente explicación, a lo incomprensible de sus desvaríos, descendidos tan profundamente en su ignorancia, sobre la inconmensurable Todopoderosa Persona de Dios, Obrando Siempre en la Justicia que define su Santidad, midiendo por lo tanto, cada uno de los movimientos de la gente, para que la justicia sea eficaz y cada quien reciba lo que merecen sus cálculos, sus movimientos a sus actuaciones.
Mateo 23: 27/33 27 »¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas(A) que son semejantes a sepulcros blanqueados! Por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia. 28 Así también ustedes, por fuera parecen justos a los hombres, pero por dentro están llenos de hipocresía y de iniquidad. 29 »¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas(B)! Porque edifican los sepulcros de los profetas y adornan los monumentos de los justos, 30 y dicen: “Si nosotros hubiéramos vivido[a] en los días de nuestros padres, no hubiéramos sido sus cómplices en derramar la sangre de los profetas”. 31 Así que dan testimonio en contra de ustedes mismos, que son hijos[b] de los que asesinaron a los profetas(C). 32 ¡Llenen, pues[c], la medida de la culpa de sus padres! 33 »¡Serpientes! ¡Camada de víboras(D)! ¿Cómo escaparán del juicio[d] del infierno[e](E)? NBLA.
el Creador dice, mediré tus actos, tendré bien presente tus dichos; resoplas, alardeando ser mas santo que los demás, santidad que es como humo en Mi Nariz, no la soporto, por lo que tendrás lo que has conseguido con tu siembra, y si no han sido destruidas todas Las "uvas", es porque unas con realmente uvas. mientras otras son maleza que las imitan, ustedes no han sido completamente destruidos, porque aun tengo genuinos siervos allí, pero de ninguna manera quedaran impunes los que se miden por sus diminutas e irrregistrables reglas.
Gálatas 7: 7/10 7 No se dejen engañar: nadie puede burlarse de la justicia de Dios. Siempre se cosecha lo que se siembra. 8 Los que viven solo para satisfacer los deseos de su propia naturaleza pecaminosa cosecharán, de esa naturaleza, destrucción y muerte; pero los que viven para agradar al Espíritu, del Espíritu, cosecharán vida eterna. 9 Así que no nos cansemos de hacer el bien. A su debido tiempo, cosecharemos numerosas bendiciones si no nos damos por vencidos. 10 Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos el bien a todos, en especial a los de la familia de la fe. NTV.
Conmensurable conducta humana, completamente conocida, abiertamente superficial, aún en la imposible posibilidad de medir lo diminuto de su superficialidad, necia, egoísta, sin cambio posible; inconmensurable responsabilidad de las personas, que pueden ser vistas, a través de la Medida, establecida por Dios, en su Unigénito Hijo Cristo Jesús, es inmedible, pues no es conducta humana, es conducta santa, es decir justa, equilibrada por el Creador, que obra en ellos, dignificando el Carácter Divino de Dios.
Efesios 4: 12/17 12 a fin de capacitar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación(A) del cuerpo de Cristo(B); 13 hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe(C) y del pleno conocimiento del Hijo de Dios(D), a la condición de un hombre maduro(E), a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo(F). 14 Entonces ya no seremos niños(G), sacudidos por las olas y llevados de aquí para allá por todo viento(H) de doctrina, por la astucia(I) de los hombres, por las artimañas engañosas del error[a](J). 15 Más bien, al hablar la verdad en amor(K), creceremos(L) en todos los aspectos en Aquel que es la cabeza(M), es decir, Cristo, 16 de quien todo el cuerpo, estando bien ajustado y unido por la cohesión que las coyunturas proveen[b], conforme al funcionamiento adecuado de cada miembro[c], produce el crecimiento del cuerpo(N) para su propia edificación en amor(O). NBLA.