! intolerantes !, ...
Juan 6: 65/66 65—Por eso les digo que nadie puede venir a mí si el Padre no lo permite. 66Esta fue la razón por la que muchos de sus seguidores lo abandonaron y no lo siguieron más. PDT. 42Jesús les dijo: —Si Dios fuera su Padre, ustedes me amarían, porque he venido a ustedes de parte de Dios. No estoy aquí por mi propia cuenta, sino que él me envió. 43¿Por qué no pueden entender lo que les digo? ¡Es porque ni siquiera toleran oírme! Juan 8: 42/43NTV.
... fanáticos, de sí mismos hasta rechazar obcecadamente todo lo que no apruebe su terca, necia,-estúpida- manera como ocupan espacio en medio de "los de su casa", de los que llama compañeros de actividades fuera de los de su casa, de los que con doblez llama correligionarios porque son compañeros de prácticas religiosas, los que no se toleran ni a sí mismos y hacen de las relaciones con los demás, dogma final en que imponen milenarias tradiciones .
Miqueas 7: 2/6 2Ya no quedan hombres fieles en la tierra; no quedan personas honestas. Todos están planeando cómo agredir y asesinar. Se atrapan con redes los unos a los otros. 3La gente es hábil para hacer el mal con sus manos. El funcionario exige dinero y se soborna al juez. Los líderes importantes hacen las leyes a su conveniencia y todas ellas se cumplen. 4Los mejores de ellos son como arbustos llenos de espinas.
Los más honestos de ellos son peor que una planta torcida, cubierta de espinas. Se acerca el momento que anunciaron tus centinelas. Llegará pronto el día de la desgracia; los perversos serán presa de la confusión. 5No creas en tu vecino, no confíes en tu amigo. Ten cuidado de lo que dices a tu esposa, incluso cuando la tengas abrazada. 6El hijo despreciará al papá, la hija se rebelará contra la mamá, la nuera se pondrá en contra de su suegra y los enemigos de cada cual estarán dentro de su propia familia. PDT.
El purulento origen de la intolerancia, esta ahi mismo, cuando todo comenzó, cuando el odio vino a ser la razón de las relaciones y actividades humanas, el odio que no soporta ser lo que cada uno "es" y por lo mismo no soporta, no tolera a los que nacen de su propio vientre, a los que rechaza con tal inclemencia, que busca todo pretexto-trabajo, reuniones por actividades, reuniones y misiones religiosas-, para no "estar cerca". aguardando con ansias echarlos de su lado definitivamente.
Genesis 4: 1/8 1Ahora bien, Adán[a] tuvo relaciones sexuales con su esposa, Eva, y ella quedó embarazada. Cuando dio a luz a Caín, dijo: «¡Con la ayuda del Señor, he tenido[b] un varón!». 2Tiempo después, dio a luz al hermano de Caín y le puso por nombre Abel. Cuando crecieron, Abel se hizo pastor de ovejas, mientras que Caín se dedicó a cultivar la tierra. 3Al llegar el tiempo de la cosecha, Caín presentó algunos de sus cultivos como ofrenda para el Señor. 4Abel también presentó una ofrenda:
las mejores partes de algunos de los corderos que eran primeras crías de su rebaño. El Señor aceptó a Abel y a su ofrenda, 5pero no aceptó a Caín ni a su ofrenda. Esto hizo que Caín se enojara mucho, y se veía decaído. 6«¿Por qué estás tan enojado? —preguntó el Señor a Caín—. ¿Por qué te ves tan decaído? 7Serás aceptado si haces lo correcto, pero si te niegas a hacer lo correcto, entonces, ¡ten cuidado! El pecado está a la puerta, al acecho y ansioso por controlarte; pero tú debes dominarlo y ser su amo». 8Cierto día Caín dijo a su hermano: «Salgamos al campo».[c] Mientras estaban en el campo, Caín atacó a su hermano Abel y lo mató. NTV.
El odio, rechaza, con intolerancia inexorable de muerte, a cada uno de los seres humanos, empezando por él mismo, su existencia esta dedicada a la estéril e inútil defensa de sus milenarias tradiciones porque las considera "suyas", aunque neciamente no telera las tradiciones de los que subyuga con torpeza intransigente, dado que esas minúsculas herencias mundanales. carnales y diabólicas, son su unica seguridad, lo único a que aferrarse, lo único que creen.
Mateo 10: 34/39 34No crean que vine a traer paz a la tierra. ¡Vine a traer guerras!; 35a poner al hijo contra su padre, a la hija contra su madre, a la nuera contra su suegra. 36¡Cada quien tendrá a sus peores enemigos en su propia casa! 37El que ame a su padre o madre más que a mí, no es digno de ser mío; y el que ame a su hijo o hija más que a mí, no es digno de ser mío. 38Y el que se niegue a tomar la cruz y seguirme, no es digno de ser mío. 39El que se apegue demasiado a su vida, la perderá; pero el que renuncie a ella porque me ama, la salvará. NBV.
Mateo 23: 21/23 21»No todos los que me dicen: “Señor, Señor”, entrarán en el reino de los cielos, sino solamente los que hacen la voluntad de mi Padre celestial. 22Aquel día muchos me dirán: “Señor, Señor, nosotros comunicamos mensajes en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros.” 23Pero entonces les contestaré: “Nunca los conocí; ¡aléjense de mí, malhechores!” DHH. 9Han aprendido muy bien la manera de rechazar los mandamientos de Dios para seguir sus propias enseñanzas. Marcos 7: 9 TLA.
El odio es el poder del aislamiento, de la division, del dislocamiento, de la separación, del caos que testifica de la separación eterna de las criaturas con su Amoroso Creador y Dios y Padre; no hay nada mas intolerable para los seres humanos que la reseña Divina de lo que es la Familia, de lo que es la iglesia, que se origina, que nace, que crece madura por amor cercano, de piel a piel, de corazón a corazón, que se disfrutan uno al otro, desde ahora y para la eternidad.
Mateo 12: 28/33 28Uno de los maestros de la Ley escuchó la conversación entre Jesús y los saduceos. Al ver que Jesús les respondió muy bien, se acercó y le preguntó: —¿Cuál es el mandamiento más importante de todos? 29Jesús le contestó: —El primero y más importante de los mandamientos es el que dice así: “¡Escucha, pueblo de Israel! Nuestro único Dios es el Dios de Israel. 30Ama a tu Dios con todo lo que piensas, con todo lo que eres y con todo lo que vales.” 31Y
el segundo mandamiento en importancia es: “Cada uno debe amar a su prójimo, como se ama a sí mismo.” Ningún otro mandamiento es más importante que estos dos. 32El maestro de la Ley le dijo:
—Muy bien, Maestro. Lo que dices es cierto: sólo Dios es nuestro dueño, y no hay otro como él. 33Debemos amarlo con todo nuestro ser, y amar a los demás como nos amamos a nosotros mismos. Estos mandamientos son más importantes que cumplir con todos los ritos y deberes religiosos. TLA.