!Es inutil!, ...

Romanos 3: 19/20 19 Ahora bien, es sabido que todo lo que dice la ley, se lo dice a quienes están bajo su yugo. Nadie, por tanto, tendrá derecho a hablar y el mundo entero ha de reconocerse culpable ante Dios. 20 A nadie, en efecto, restablecerá Dios en su amistad por la observancia de la ley, pues la misión de la ley es hacernos conscientes del pecado. BLP.
 
... es imposible cumplir la ley, como mera propuesta intelectual resultado de esfuerzos humanos; porque la Ley es Dios y Dios es el Verbo encarnado que es exacta forma e imagen de Dios consecuencia de la operación de Dios Espíritu Santo; las solas  mentes-almas de los seres humanos son incapaces para obrar de acuerdo con la ley, porque obrar según la Ley es fruto del orden espiritual, es fruto de la vida, es atributo dado por Dios a los que lo aman    
 
Romanos 3: 21/24 21 Pero ahora, aparte de la ley[f], la justicia de Dios ha sido manifestada, atestiguada por la ley y los profetas; 22 es decir, la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen; porque no hay distinción; 23 por cuanto todos pecaron[g] y no alcanzan la gloria de Dios, 24 siendo justificados gratuitamente por su gracia por medio de la redención que es en Cristo Jesús, LBLA.
 
Es en vano todo intento, porque vano es el "corazon del hombre", que por su vaciedad quiso y quiere hacer de Dios el catalogo religioso con el que el sistema que fundo satanás ejercita la doble vida, de los seres humanos durante las asistencias a las ceremonias, rituales, cultos, genuflexiones, sacrificios prometidos, junto con todo lo demás que hacen los "correligionarios" en todo el mundo, pero que no afecta en nada su modo de existir.
 
Romanos 3: 25/26 25 Pues Dios ofreció a Jesús como el sacrificio por el pecado. Las personas son declaradas justas a los ojos de Dios cuando creen que Jesús sacrificó su vida al derramar su sangre. Ese sacrificio muestra que Dios actuó con justicia cuando se contuvo y no castigó a los que pecaron en el pasado, 26 porque miraba hacia el futuro y de ese modo los incluiría en lo que llevaría a cabo en el tiempo presente. Dios hizo todo eso para demostrar su justicia, porque él mismo es justo e imparcial, y declara a los pecadores justos a sus ojos cuando ellos creen en Jesús. NTV.
 
La espantosa realidad de haber nacido muertos, muertos espiritualmente, justifican la palabra fracaso con la que Dios nos expone en los limites del Antiguo Testamento, "muertos en sus delitos y pecados"  heredados, mas los cometidos por la deliberada divagación de la mente-alma, hambrienta de satisfacciones físicas; de los apetitos y los instintos, aclara como la muerte es el estado "devengado" por el pecado", absolutamente aislada de la Vida, que es Santidad.
 
Romanos 3: 27/28 27 ¿Podemos, entonces, jactarnos de haber hecho algo para que Dios nos acepte? No, porque nuestra libertad de culpa y cargo no se basa en la obediencia a la ley. Está basada en la fe. 28 Así que somos declarados justos a los ojos de Dios por medio de la fe y no por obedecer la ley.  29 Después de todo, ¿acaso Dios es solo el Dios de los judíos? ¿No es también el Dios de los gentiles? Claro que sí. 30 Hay solo un Dios, y él declara justos a judíos y gentiles[a] únicamente por medio de la fe. NTV. 
 
La muerte es el fruto del pecado, en cumplimiento de la Justicia de Dios, de su Santidad y su Amor; la muerte como hecho eterno, solo podía solucionarse, durante el tiempo de conciencia que Dios le concede a los seres humanos que pasan  por este "mundo", tiempo en que si lo deciden libremente, pueden, cambiar el juicio decretado, aceptando, primero su pecado, segundo su incapacidad para solucionarlo, tercero, que la Vida ofrecida en Santidad como redención de Sangre por Cristo Jesús, es la justificacion exacta ante Dios, por tanto la Salvación de la muerte eterna.
 
Efesios 2: 13/17 13 Pero ahora, unidos a Cristo Jesús por la sangre que él derramó, ustedes que antes estaban lejos están cerca.14 Cristo es nuestra paz. Él hizo de judíos y de no judíos un solo pueblo, destruyó el muro que los separaba y anuló en su propio cuerpo la enemistad que existía. 15 Puso fin a la ley que consistía en mandatos y reglamentos, y en sí mismo creó de las dos partes un solo hombre nuevo. Así hizo la paz. 16 Él puso fin, en sí mismo, a la enemistad que existía entre los dos pueblos, y con su muerte en la cruz los reconcilió con Dios, haciendo de ellos un solo cuerpo. DHH.         

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