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2 de Corintios 4: 1/4 Por lo tanto, puesto que por la misericordia de Dios hemos recibido este ministerio, no nos desanimamos; 2 por el contrario, renunciamos a lo oculto y vergonzoso, y no andamos con engaños, ni falseamos la palabra de Dios, sino que por medio de la manifestación de la verdad nos recomendamos a toda conciencia humana delante de Dios. 3 Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, lo está entre los que se pierden; 4 pues como ellos no creen, el dios de este siglo les ha cegado el entendimiento para que no resplandezca en ellos la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios. RVC.
... estamento con el que Cristo Jesús, expone al líder, de las huestes, potestades, principados y gobernadores de las tinieblas, que operan desde las regiones celestes, reconocidos por los seres humanos como la única autoridad en el mundo; ese satanás, que hace de las criaturas creadas por Cristo Jesús, los ejecutores del asesinato, del engaño, de la mentira, de la perversión, en fin del pecado, que causa en cada acción injusta, pecaminosa, la confirmación de la muerte.
Efesios 6: 10/13 10 Por lo demás, hermanos míos, manténganse firmes en el Señor y en el poder de su fuerza. 11 Revístanse de toda la armadura de Dios, para que puedan hacer frente a las asechanzas del diablo. 12 La batalla que libramos no es contra gente de carne y hueso, sino contra principados y potestades, contra los que gobiernan las tinieblas de este mundo, ¡contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes! 13 Por lo tanto, echen mano de toda la armadura de Dios para que, cuando llegue el día malo, puedan resistir hasta el fin y permanecer firmes. RVC.
La asociación que suceden de manera natural en las relaciones entre lo seres humanos, están encaminadas todas, a causar daño, en los semejantes, en forma tan "normal", que de ese daño, dependerá el éxito y la prosperidad, que limite cada ser, a su alrededor, generando revancha, retaliación, venganza en los afectados, hechos que le dan forma al circulo vicioso de la guerra como sustantivo de la existencia.
2 de Corintios 6: 14/16 14 No se asocien íntimamente con los que son incrédulos. ¿Cómo puede la justicia asociarse con la maldad? ¿Cómo puede la luz vivir con las tinieblas? 15 ¿Qué armonía puede haber entre Cristo y el diablo[a]? ¿Cómo puede un creyente asociarse con un incrédulo? 16 ¿Y qué clase de unión puede haber entre el templo de Dios y los ídolos? Pues nosotros somos el templo del Dios viviente. Como dijo Dios: «Viviré en ellos y caminaré entre ellos. Yo seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.[b] NTV.
No hay posibilidad alguna para los que nacen en este mundo, que los libre de las cadenas del dios de este siglo, razón, que se formaliza en cada uno de los que nacen siempre bajo las maquinaciones, las manipulaciones, la astucia del padrastro, que les hará participes de su estamento, del siglo, como la única forma irremediable, en que llevaran a efecto su paso inútil, estéril, por la "franja", en tiempo, que le corresponda, desde que nacen, hasta que "mueren", para rendir cuentas, ante El Creador.
2 de Corintios 5: 14/17 14 El amor de Cristo se ha apoderado de nosotros desde que comprendimos que uno murió por todos y que, por consiguiente, todos han muerto. 15 Y Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí mismos, sino para él, que murió y resucitó por ellos. 16 Por eso, nosotros ya no pensamos de nadie según los criterios de este mundo; y aunque antes pensábamos de Cristo según tales criterios, ahora ya no pensamos así de él. 17 Por lo tanto, el que está unido a Cristo es una nueva persona. Las cosas viejas pasaron; se convirtieron en algo nuevo. DHH.
Pero para los que ha desechado, la astuta mentira, el engaño, de satanás, y lo han descubierto como su asesino, como su corruptor, como el autor intelectual de la imposible de medir, de la imposible de describir capacidad para hacer el mal, en su extremadamente pecaminosidad, en el inexplicable, sórdido disfrute del envilecimiento, la violación, física, y mental, del despojo de cuerpos, y de mentes-almas-, fue levantada la cruz de la redención, del perdón, en Cristo Jesús.
Gálatas 2; 17/20 17 »Ahora bien, ¿qué pasa si confiamos en Cristo para salvarnos y luego nos damos cuenta de que nosotros mismos somos pecadores? ¿Tendremos que decir que la fe en Cristo fue nuestra perdición? ¡De ninguna manera! 18 Si uno vuelve a edificar lo que había destruido, se hace transgresor. 19 Yo estoy muerto por causa de la ley, pero ahora vivo para Dios. 20 Estoy crucificado con Cristo, y ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí. Y esta vida que ahora tengo la vivo por mi fe en el Hijo de Dios, quien me amó y se entregó por mí. NBV.