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Salmo 57: 1/4 1¡Ten compasión de mí, oh Dios, ten compasión de mí; pues en ti confío! Bajo la sombra de tus alas me esconderé hasta que pase la tormenta. 2 Clamaré al Dios Altísimo, al Dios que cumple en mí su propósito. 3 De lo alto enviará ayuda para salvarme, me librará de aquellos que quieren atraparme. Dios enviará su amor y su verdad. 4 Estoy rodeado de leones feroces; de hombres devoradores que tienen dientes como agudas lanzas y flechas; tienen lenguas como espadas. NBV.
... en la inmunidad que les proporciona la certeza, que nada, ni nadie, puede conocer sus pensamientos; inmunidad que recrea la impunidad en que las maquinaciones, cargadas de odio, redondeadas en el orgullo, cometidas en la arrogancia, los hace intocables, libres de la "culpa", que disfrutan en sus entrañas, en tanto las victimas, se retuercen al ser devoradas, desmembradas, hechas satisfacción satírica, adicción a la carne congénere, que "alimenta sus escuálidas existencias".
Nahum 3: 14/16 14 ¡Prepárate para el ataque! Almacena agua. Refuerza tus fortificaciones. Prepara muchos ladrillos para reparar tus murallas. Entra al pozo, pisa el lodo y mételo en los moldes. 15 Pero en medio de tus preparativos te devorará el fuego; con espada se te matará. El enemigo te consumirá como la langosta joven que se come todo lo que halla a su paso. No tienes posibilidad de escapar, aunque te multiplicaras con la rapidez que lo hace la langosta. 16 Mercaderes tan numerosos como las estrellas llenaron la ciudad con muchas riquezas, pero tus enemigos pululan como langostas, y se las llevan. NBV.
Afianzados en los argumentos antiguos, las fabulas que los anteceden, el bagaje de la experiencia, humana, extasiada en las prácticas, para invadir satíricamente, la inocencia de los niños, que se cicatriza en sus conciencias como consecuencia de la devastación causada por cabríos que envilecen los sagrados cuerpecitos, dado su propio envilecimiento, su conciencia marcada y sus zombicos cuerpos, que son la herramienta para la orgia antropófaga en que se "sienten tan seguros".
Salmo 44: 20/22 20Dios nuestro, si nos hubiéramos olvidado de tu nombre, o si hubiéramos rendido culto a otro dios, 21 ¿acaso tú no habrías llegado a saberlo? ¡Si tú conoces los secretos más recónditos! 22 Pero por ti nos matan todo el tiempo; ¡nos consideran ovejas para el matadero! RVC.
13No hay nada creado en el mundo que se pueda esconder de Dios; todo está desnudo y expuesto a su vista. Es a él a quien tendremos que rendirle cuentas de nuestra vida. Hebreos 4 13 PDT.
Impune porque los que violo, los que devoro, los que envilezco, no saben que soy yo, nadie sabe lo que hay en mi mente-alma-, soy completamente sin culpa ante los demás, especialmente ante las victimas de la depravación que invade mis pensamientos, que preña de pecado mi alma-mente- de manera que la muerte es dada a "luz" en cada acto de existencia que le da forma y figura a la sociedad y el sistema religioso en que me desenvuelvo.
Judas 1: 10/13 10Pero éstos blasfeman de las cosas que no conocen; y en las que por instinto conocen se corrompen como animales irracionales. 11 ¡Lástima de ellos!, porque han seguido el camino de Caín. Por amor al dinero cayeron en el error de Balaam y murieron en la rebelión de Coré. 12 Éstos empañan los ágapes que ustedes celebran, pues sin vergüenza alguna comen pensando sólo en sí mismos. Son nubes sin agua, que el viento arrastra de un lado a otro; árboles otoñales que no dan fruto; carentes de raíces, se han secado y vuelto a secar. 13 Son indómitas olas del mar, cuya espuma es su propia vergüenza; estrellas errantes, cuyo eterno destino serán las más densas tinieblas. RVC.
Los que me anteceden y lo mediatos, los que están conmigo y seguramente los que estarán, siempre nos hemos salido con la nuestra, todos han pasado por este mundo en completa impunidad, han estado, están y estarán "sin culpa" ante la sociedad y el sistema religioso; si ciertamente ante la sociedad y el sistema religioso, pero jamás lo estarán de la infalible Justicia del Creador; ante El es imposible quedar impune, El dará conforme a lo que cada quien hizo.
Números 14: 17/18 17Ahora, pues, Señor mío, te ruego que hagas honor a tu fortaleza, como tú mismo lo prometiste al decir: 18 “El Señor es tardo para la ira y abundante en misericordia; el Señor perdona la iniquidad y la rebelión, pero no las deja impunes, sino que castiga la iniquidad de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación”. BLP. 7No os hagáis ilusiones: de Dios no se burla nadie. Lo que cada uno haya sembrado, eso cosechará. Galatas 6: 7 BLP.