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1 de Juan 2: 15/17 15No amen al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. 16Porque todo lo que hay en el mundo, es decir, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. 17El mundo y sus deseos pasan; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. RVC.
... El mas alto desempeño, proyecto para la existencia que recae sobre la especie humana, constituye la esencia de la esclavitud al ego, al orgullo, que debe ser reconocido. apoyado, alabado, premiado en individualidades a las que la gran masa de sus congéneres, miran, expectantes en el engaño, de "llegar a ser", como ellos, como los únicos, los especiales, los que son puestos en los pedestales del mundo y del sistema religioso, por el dios de este mundo.
2 de Pedro 2: 17/19 17Éstos son fuentes sin agua, nubes que arrastra la tormenta, y para siempre les espera la más densa oscuridad. 18Cuando hablan, lo hacen con palabras arrogantes y vanas; mediante las pasiones humanas y el libertinaje seducen a los que habían comenzado a apartarse de los que viven en el error. 19Les prometen libertad, pero ellos mismos son esclavos de la corrupción, pues todo aquel que es vencido, se vuelve esclavo del que lo venció. RVC.
Juegan, y son los mejores en el mundo, juegan y son los mejores jugadores del sistema religioso; Estos escasos y muy elevados jugadores, son la gloria de la gente que es capaz de cualquier acción que compromete sus cuerpos, sus equilibrios mentales-alma-, sus finanzas, y lo mas real y único, la familia, para ofrecerse en sacrificio idolátrico, a los ídolos levantados "manipuladamente", como lideres en los escenarios sociales y en los religiosos.
Santiago 4: 4 4¡Ay, gente adúltera! ¿No saben que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Todo aquel que quiera ser amigo del mundo, se declara enemigo de Dios. RVC. 20 Lo que digo es que cuando los paganos ofrecen algo en sacrificio, se lo ofrecen a los demonios, y no a Dios, y yo no quiero que ustedes tengan nada en común con los demonios. 21 No pueden beber de la copa del Señor y, a la vez, de la copa de los demonios; ni pueden participar de la mesa del Señor y, a la vez, de la mesa de los demonios. 1 de Corintios 10: 20/21 DHH.
Los ídolos de la gente en lo social y religioso, son "seres", aislados, solitarios, incapaces de ser parte de algo, impedidos por definición para ser parte de la familia, unica institución creada por Dios, tan valiosa, tan importante que fue capaz de crucificar a su hijo para restarla, para redimirla, la lisonja que reciben siempre es publica, y la reciben de seres humanos, aislados, solitarios, los que abandonaron sus familias, para entregarse a la mentira de la "gloria de este mundo".
Lucas 4: 5/7 5Entonces el diablo lo llevó a una parte alta y desplegó ante él todos los reinos del mundo en un solo instante. 6—Te daré la gloria de estos reinos y autoridad sobre ellos —le dijo el diablo—, porque son míos para dárselos a quien yo quiera. 7Te daré todo esto si me adoras. NTV. 15Esa sabiduría no es la que viene del cielo, sino viene del mundo, del ser humano y del diablo, 16porque donde hay envidias y rivalidades, también hay confusión y todo tipo de maldad. Santiago 3: 15/16 NBV.
Jugar ofreciéndose como la mejor oferta en la banca de los tahúres mundanales, alimenta, desarrolla la adicción humana por el pecado, que constantemente da a luz la muerte, circulando alrededor de su egoísmo, el soliloquio eterno, que expone el odio como forma de "vida"; así Juegan los que al mismo tiempo son émulos religiosos, que la gente adora, haciéndose miembro, de las grandilocuentes, empresas religiosas transnacionales que lideran "los ídolos", que son sus dioses.
Juan 13: 9/15 9Simón Pedro le dijo: ―¡Señor, entonces no sólo los pies sino también las manos y la cabeza! 10Jesús le contestó: ―El que está recién bañado no necesita lavarse más que los pies, pues está completamente limpio. Y ustedes están limpios, aunque no todos. 11Jesús sabía quién lo iba a traicionar, y por eso dijo que no todos estaban limpios. 12Después de lavarles los pies, se puso el manto y otra vez se sentó. Entonces les preguntó: ―¿Entienden ustedes lo que les he hecho? 13Ustedes me llaman Maestro y Señor, y dicen la verdad porque lo soy. 14Pues si yo, el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros. 15Yo les he dado el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes. NBV.