Los unicos, ....
Isaías 45: 20/22 20»Reúnanse y vengan, acérquense todos los sobrevivientes de los pueblos. Son unos ignorantes quienes llevan en procesión sus ídolos de madera y se ponen a orar a un dios que no puede salvarlos. DHH. 21Vamos ante el juez, para ver si pueden responderme: ¿Quién anunció estas cosas mucho antes de que sucedieran? Fui yo, el único Dios, y no hay otro dios fuera de mí. Sólo yo tengo el poder para ofrecer justicia y salvación. TLA. 12 Entonces la gente de Judá y los habitantes de Jerusalén irán a pedir ayuda a los dioses a los que ofrecen incienso, pero ellos no podrán salvarlos cuando llegue la calamidad. 13 Judá tiene tantos dioses como ciudades, y los habitantes de Jerusalén han levantado tantos altares para ofrecer incienso a Baal como calles hay en la ciudad. 14 Así que tú, Jeremías, no ores en favor de este pueblo; no me ofrezcas oraciones ni súplicas por ellos, porque no voy a escucharlos cuando me pidan ayuda en medio de la calamidad. Jeremías 11: 12/14 DHH.
... somos nosotros, somos el único dios, nuestro grupo religioso, es dios y es lo "único" que obedecemos, lo único que aceptamos; los hombres y mujeres que nos dirigen, son nuestra conexión con la esencial de nuestro alabado, adorado, reverenciado grupo; son ellos, los lideres, los que tienen la autoridad y "consintieron" entronar nuestros dioses y diosas dentro de los templos, "ellos "firmaron los decretos mediante los que nuestras deidades fueron rebautizadas, ellos les asignaron nichos muy significativos posicionados privilegiadamente "en las naves interiores", ademas "ellos", conservan la imagen de un enemigo que los acusó hace algo mas de dos mil años y que crucificaron.
Ezequiel 8: 10/13 11 Setenta jefes israelitas estaban de pie frente a los ídolos, rindiéndoles culto. Entre ellos se encontraba Jazanías hijo de Safán. Cada uno tenía en la mano un incensario, del cual subía una fragante nube de incienso. 12 Y me dijo: «¿Ves lo que hacen en secreto los ancianos israelitas, cada uno en el nicho de su ídolo? Piensan que yo no los veo, que he abandonado el país.» 13 Y añadió: «Todavía los verás hacer cosas peores.» 14 Y me llevó a la puerta de entrada del templo del Señor, que da hacia el norte. Allí estaban sentadas unas mujeres, llorando por el dios Tamuz. 15 Entonces me dijo: «¿Ves esto? Pues todavía verás cosas peores.»
16 Entonces me llevó al atrio interior del templo del Señor y, a la entrada del santuario, entre el vestíbulo y el altar, unos veinticinco hombres estaban de espaldas al santuario; inclinados hacia el oriente, y con la frente en el suelo, adoraban al sol. 17 Entonces el Señor me dijo: «¿Lo ves? ¡No le ha bastado al pueblo de Judá con hacer aquí estas cosas tan detestables, que además ha llenado el país de actos de violencia! Una y otra vez provocan mi ira, y hacen que su pestilencia me llegue a la nariz. 18 Pero yo voy a actuar con ira. No tendré ninguna compasión de ellos. Aunque me llamen a gritos, no los escucharé.» DHH.
El hombre que los desenmascaró, que los declaró hipócritas; aquellos idólatras, rechinaban los dientes cada vez que El, les advertía sobre su perversión, sobre su pecado; ese hombre se llamaba Jesús, ese hombre les hizo saber que en Verdad era Dios, el Creador, pero el perfecto fanatismo de los antepasados de nuestros "ellos", enfurecidos le recalcaban; solo eres un hombre, como puedes comparte con semejante templo que nos edificó el sodomita Herodes, como te atreves a enfrentarte al púrpura, y rojo de nuestros vestidos ceremoniales y lo asesinaron, lo humillaron colgándolo en la cruz, en medio de dos menos merecedores de la cruz que "ellos".
Apocalipsis 17: 3/5 3Luego, en la visión que me hizo ver el Espíritu, el ángel me llevó al desierto.
Allí vi una mujer montada en un monstruo rojo, el cual estaba cubierto de nombres ofensivos para Dios y tenía siete cabezas y diez cuernos. 4 Aquella mujer iba vestida con ropa de colores púrpura y rojo, y estaba adornada con oro, piedras preciosas y perlas. Tenía en la mano una copa de oro llena de cosas odiosas y de la impureza de su prostitución; 5 y llevaba escrito en la frente un nombre misterioso: «La gran Babilonia, madre de las prostitutas y de todo lo que hay de odioso en el mundo.» DHH.
Nuestros "ellos", de los que heredamos el fanatismo, que es el cemento con el que se mampostea el odio, nos hace iguales a ellos, pero dicho de mejor manera, somos peores que "ellos", porque la herencia incluye el testimonio de la herencia vivida por los depravados, apóstatas, que descargaron todas las fuerzas del pecado es decir del infierno sobre la Persona del redentor, herencia que permanece en el mensaje que transmite la imagen de "un hombre", completamente destrozado, abatido físicamente con brutal ignominia, partido por la pezuñas de los endemoniados que hechos demonios, "festejan" año tras año", lo que creen fue su victoria.
1 de Pedro 2: 20/24 20 Pues si a ustedes los castigan por haber hecho algo malo, ¿qué mérito tendrá que lo soporten con paciencia? Pero si sufren por haber hecho el bien, y soportan con paciencia el sufrimiento, eso es agradable a Dios. 21 Pues para esto los llamó Dios, ya que Cristo sufrió por ustedes, dándoles un ejemplo para que sigan sus pasos. 22 Cristo no cometió ningún pecado ni engañó jamás a nadie. 23 Cuando lo insultaban, no contestaba con insultos; cuando lo hacían sufrir, no amenazaba, sino que se encomendaba a Dios, que juzga con rectitud. 24 Cristo mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, para que nosotros muramos al pecado y vivamos una vida de rectitud. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados. DHH.
Todo insulto, toda humillación, toda vociferación toda infamia, todo engaño, toda trampa, todo desprestigio, toda negación de inteligencia porque lo que fue usado contra El fue astucia, toda reseña de la conducta legal que obliga a lavar platos, todo insulto, todo escupitajo, toda ostentación carnal, material diabólica, todo desdén, todo desprecio, fue proferido contra El; tildado por lo que insulsamente consideraban rebeldía, lo llamaron protestante, se burlaron de su estilo de vida, del Evangelio, fue desafiado a demostrar su Poder, mientras lo amenazaban de muerte; nada falto de lo que compone el cenagoso pantano infernal, para que la Obra de Cristo Jesús se consumara.
1 de Timoteo 6: 3/5 3Algunos enseñan ideas extrañas que no están de acuerdo con la verdadera enseñanza de nuestro Señor Jesucristo, la cual conduce a una vida recta, dedicada a Dios. 4 Esos maestros se enorgullecen de lo que saben, pero realmente no saben nada. Están obsesionados con cuestiones y discusiones que resultan en envidias, conflictos, insultos, malas sospechas y 5 peleas constantes. Tienen una mente perversa, terminan alejados de la verdad y piensan que la vida dedicada a Dios es una manera de ganar dinero. PDT. 28 Como no han querido tener en cuenta a Dios, Dios los
ha dejado hacer todo lo malo que su mente inútil los lleva a hacer. 29 Son gente injusta, malvada y codiciosa. Son envidiosos, asesinos, peleadores, tramposos y chismosos. 30 Hablan mal de los demás, odian a Dios, son insolentes y orgullosos, y se creen muy importantes. Siempre están inventando nuevas maneras de hacer el mal, y no obedecen a sus padres. 31 No quieren entender la verdad, ni se puede confiar en ellos. No aman a nadie ni se compadecen de nadie. 32 Dios ya lo ha dicho, y ellos lo saben, que quienes hacen esto merecen la muerte. Y a pesar de eso, no sólo siguen haciéndolo, sino que felicitan a quienes también lo hacen. Romanos 1: 28/32. TLA.