El orden, ...
Apocalipsis 5: /9 7El Cordero fue y tomó el libro enrollado que tenía en la mano derecha el que estaba sentado en el trono. 8Apenas hizo esto, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se arrodillaron delante de él. Cada uno tenía un arpa, y llevaba una copa llena de incienso que representaba las oraciones del pueblo de Dios. 9Y todos ellos cantaban esta nueva canción: «Sólo tú mereces tomar el libro y romper sus sellos. Porque fuiste sacrificado, y con tu sangre rescataste para Dios, a gente de toda raza, idioma, pueblo y nación. TLA.
... que "disolvió" el desorden, es la presencia del orden sobre la tierra, es la presencia de Dios, levantado en el monte de la calavera para que todo pueblo y nación, encontrara explicación al caos armado por el dios de este mundo, como marco dentro del que la humanidad "creó" su propio "orden, diseñado a partir del sitio en que "están", el color de la piel, la comida, la forma de vestirse, el idioma, la solución del ocio al que generalmente llaman trabajo; diseño que le da "forma" a la faz de la tierra, porción a porción, como mapas, tan celosamente guardados que han sido la "excusa" de todos los tiempos para hacer del pecado el espantoso motivo de la existencia humana.
Hechos 17: 24/28 24»El Dios que hizo el mundo y todo lo que hay en él es Señor del cielo y de la tierra. No vive en templos construidos por hombres, 25ni se deja servir por manos *humanas, como si necesitara de algo. Por el contrario, él es quien da a todos la vida, el aliento y todas las cosas. 26De un solo hombre hizo todas las naciones[a] para que habitaran toda la tierra; y determinó los períodos de su historia y las fronteras de sus territorios. 27Esto lo hizo Dios para que todos lo busquen y, aunque sea a tientas, lo encuentren. En verdad, él no está lejos de ninguno de nosotros, 28“puesto que en él vivimos, nos movemos y existimos”. Como algunos de sus propios poetas griegos han dicho: “De él somos descendientes.” NBD.
La Sangre del Cordero de Dios "quitó" el pecado del mundo, lo redimió, lo "disolvió"; el caos fue declarado muerto y fue restaurado el orden, la armonía la cordura; en la cruz que Dios levantó para crucificar a su Unigénito, todas las naciones del mundo conocido que le daban "vida" a la cosmopolita Jerusalén, conocieron a Dios, asistieron como testigos ante el genuino altar que sumó los tiempos en uno solo, en la consumación de la Obra que cumplió Cristo Jesús; sus "mapas", terrenales, carnales, mundanales y diabólicos, consolidaron los "entornos", en uno solo, el pecado común a toda la especie humana y quedó en vigencia el Mapa Espiritual que revela a Dios que es Santo.
Santiago 4: 1/5 ¿Saben por qué hay guerras y pleitos entre ustedes? ¡Pues porque no saben dominar su egoísmo y su maldad! 2 Son tan envidiosos que quisieran tenerlo todo, y cuando no lo pueden conseguir, son capaces hasta de pelear, matar y promover la guerra. ¡Pero ni así pueden conseguir lo que quieren! Ustedes no tienen, porque no se lo piden a Dios. 3 Y cuando piden, lo hacen mal, porque lo único que quieren es satisfacer sus malos deseos. 4 Ustedes no aman a Dios, ni lo obedecen. ¿Pero acaso no saben que hacerse amigo del mundo es volverse enemigo de Dios? ¡Pues así es! Si ustedes aman lo malo del mundo, se vuelven enemigos de Dios. TLA.
Lo que Dios dispuso como prueba para ser reconocido, entre los que existen, y los que viven, "respirado el mismo aire", unos aquí, otros allá, pero todos de la misma mano, todos criaturas, aunque unas, por millones solo existiendo y otras muy pocos viviendo, resultado de las diferencias que por ser "variadas" deben ser el disfrute que fructifica en compartir, que por causas del pecado de muchos, son la estéril motivación para amenazar, para infundir miedo y en el éxtasis del terror, atacar para destruir, matar, robar, "obtusados" por el diablo, que los anima incesantemente, tomando lugar en cada mapa como dios, que es adorado mediante, robo, muerte, destrucción, odio.
1 de Pedro 2: 7/10 7Así es, ustedes, los que confían en él, reconocen la honra que Dios le ha dado;[a] pero para aquellos que lo rechazan, «La piedra que los constructores rechazaron ahora se ha convertido en la piedra principal». 8Además, «Él es la piedra que hace tropezar a muchos, la roca que los hace caer". Tropiezan porque no obedecen la palabra de Dios y por eso se enfrentan con el destino que les fue preparado. 9Pero ustedes no son así porque son un pueblo elegido. Son sacerdotes del Rey,[d] una nación santa, posesión exclusiva de Dios. Por eso pueden mostrar a otros la bondad de Dios, pues él los ha llamado a salir de la oscuridad y entrar en su luz maravillosa. 10«Antes no tenían identidad como pueblo, ahora son pueblo de Dios. Antes no recibieron misericordia, ahora han recibido la misericordia de Dios»[e]. NTV.
Ante la cruz el mapa espiritual antiguo, rasguñado por la garras de las tinieblas, fue descifrado como la explicación manipulada a la única familia que existía en el mundo, guiada por el impostor que se hizo pasar por padre; los limites marginales señalados como sociedad y religion, le permitieron a la gente de este y aquel otro lugar, agregar a sus costumbres, a sus mapas-entornos- el ingrediente religioso que cada quien acepto como dios, de manera que el que amenaza mi mapa, amenaza inclusive a mi dios; este caos, este orden, quedo al descubierto por la revelación del Hijo acerca del Padre, que es la revelación de la Familia de la que Cristo Jesus, es cabeza, la Familia de Dios.
1 de Juan 3: 7/10 Queridos hijos, no dejen que nadie los engañe acerca de lo siguiente: cuando una persona hace lo correcto, demuestra que es justa, así como Cristo es justo. 8Sin embargo, cuando alguien sigue pecando, demuestra que pertenece al diablo, el cual peca desde el principio; pero el Hijo de Dios vino para destruir las obras del diablo. 9Los que han nacido en la familia de Dios no se caracterizan por practicar el pecado, porque la vida de Dios[a] está en ellos. Así que no pueden seguir pecando, porque son hijos de Dios. 10Por lo tanto, podemos identificar quiénes son hijos de Dios y quiénes son hijos del diablo. Todo el que no se conduce con rectitud y no ama a los creyentes[b] no pertenece a Dios. NTV.