!! irrumpir !!, ...
Lucas 13: 24/28 24 —Procuren entrar por la puerta angosta; porque les digo que muchos querrán entrar, y no podrán. 25 Después que el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, ustedes, los que están afuera, llamarán y dirán: “Señor, ábrenos.” Pero él les contestará: “No sé de dónde son ustedes.” 26 Entonces comenzarán ustedes a decir: “Hemos comido y bebido contigo, y tú enseñaste en nuestras calles.” 27 Pero él les contestará: “No sé de dónde son ustedes. ¡Apártense de mí, malhechores!” 28 Entonces vendrán el llanto y la desesperación, al ver que Abraham, Isaac, Jacob y todos los profetas están en el reino de Dios, y que ustedes son echados fuera. DHH.
... aparecer de manera repentina, es venir del lugar escenario de lo que la gente llama vida, es "salir", de sus casas, para invadir otra, correr de sus propios dominios testigos de las actividades, de las obras que son planeadas muy lejos del recinto al que llegan con violencia, reclamando explicaciones a sus fracasos, a la ruina, a la venida abajo, que no esperaban, porque todo lo tenían por seguro, vienen, y tratan de entrar de improviso, evidencia de haber estado afuera, de no pertenecer "a la casa".
Jeremías 13: 10/11 10 Este pueblo malvado se niega a obedecer mis órdenes y sigue tercamente las inclinaciones de su corazón. Se ha ido tras otros dioses, para servirlos y adorarlos. Es como ese cinturón, que no sirve para nada. 11 Así como uno se aprieta el cinturón alrededor de la cintura, así tuve a todo el pueblo de Israel y a todo el pueblo de Judá muy unidos a mí, para que fueran mi pueblo y dieran a conocer mi nombre, y fueran mi honor y mi gloria. Pero no me obedecieron. Yo, el Señor, lo afirmo. DHH.
Los que han entrado por la puerta angosta, los que pertenecen a la casa, los que como uno solo, han cumplido el propósito del Dueño, de edificarla de fortalecerla de dignificarla; los que saben que esa es su casa, en la que invierten cada minuto de vida, y cada centavo que el dueño pone en su manos, manos que obran para "invertir", eternamente desde ya en la que será su casa definitiva, la cas de la que fueron arrancados por la muerte, esa casa en la siempre están dentro.
Juan 14: 1/6 «No se turbe su corazón. Ustedes creen en Dios; crean también en mí. 2 En la casa de mi Padre hay muchos aposentos. Si así no fuera, ya les hubiera dicho. Así que voy a preparar lugar para ustedes. 3 Y si me voy y les preparo lugar, vendré otra vez, y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, también ustedes estén. 4 Y ustedes saben a dónde voy, y saben el camino.» 5 Tomás le dijo: «Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo podemos saber el camino?» 6 Jesús le dijo: «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. RVC.
Irrumpir en la casa a la que no han pertenecido, pretendiendo violar los derechos inherentes a los miembros de la familia que la habita, es el alarde de la conducta humana religiosa, que se ha dedicado a edificar su lugar de injusticia-casa-, y al lado edifican el lugar religioso que les confiere la bendición de los dioses, la idolátrica complicidad con la disolución, la división, la rivalidad, que se resume en el sabotaje al Plan del Creador, Absoluto y único creador y Dios y Padre.
Mateo 13: 47/50 47 »Asimismo, el reino de los cielos es semejante a una red que, lanzada al agua, recoge toda clase de peces. 48 Una vez que se llena, la sacan a la orilla, y los pescadores se sientan a echar el buen pescado en cestas, y desechan el pescado malo. 49 Así será al fin del mundo: los ángeles saldrán y apartarán de los hombres justos a la gente malvada, 50 y a esta gente la echarán en el horno de fuego. Allí habrá llanto y rechinar de dientes.» RVC.
Los que han estado siempre afuera, son completos desconocidos del Padre de Familia, El Padre Amoroso encargado por entero de cuidar a los de su Casa, interesándose en cada uno de ellos, en la preciosa dedicación de la edificación individual de cada hijo, preparándolo para el tiempo de su realización en el renio del cielo; los de afuera, no tienen Padre, porque son imperdonado idolatras que le dicen padre al que los asesino, los que por su estado, llaman padre a cualquier cosa.
Mateo 7: 21/23 21 »No todos los que me dicen: “Señor, Señor”, entrarán en el reino de los cielos, sino solamente los que hacen la voluntad de mi Padre celestial. 22 Aquel día muchos me dirán: “Señor, Señor, nosotros comunicamos mensajes en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros.” 23 Pero entonces les contestaré: “Nunca los conocí; ¡aléjense de mí, malhechores!” DHH.