!!! Reservados !!!, ...
Éxodo 14: 11/13 11 y le dijeron a Moisés: —¿Por qué nos trajiste aquí a morir en el desierto? ¿Acaso no había suficientes tumbas para nosotros en Egipto? ¿Qué nos has hecho? ¿Por qué nos obligaste a salir de Egipto? 12 ¿No te dijimos que esto pasaría cuando aún estábamos en Egipto? Te dijimos: “¡Déjanos en paz! Déjanos seguir siendo esclavos de los egipcios. ¡Es mejor ser un esclavo en Egipto que un cadáver en el desierto!”.13 Pero Moisés les dijo: —No tengan miedo. Solo quédense quietos y observen cómo el Señor los rescatará hoy. Esos egipcios que ahora ven, jamás volverán a verlos. NTV. 30 Los que lloran o los que se alegran o los que compran cosas, no deberían ser absorbidos por sus lágrimas ni su alegría ni sus posesiones. 31 Los que usan las cosas del mundo no deberían apegarse a ellas. Pues este mundo, tal como lo conocemos, pronto desaparecerá. 1 de Corintios 7: 30/31 NTV.
... establecidos por El Creador, como su remanente, como el saldo, depurado, selecto, acrisolado, digno por la pureza de su fidelidad, de su conocimiento del Absoluto Único Dios, son los hijos en que toma forma la familia, cuyo Padre fue conocido, al conocer al Hermano Mayor, a Cristo Jesús, en Quien son coherederos de la Herencia Divina; la familia que es la iglesia, apartada del mundo, mediante el "escudo espiritual", viviendo en completa separación, con la gente de este mundo.
Juan 17: 1/5,13/16 Después de decir todas esas cosas, Jesús miró al cielo y dijo: «Padre, ha llegado la hora. Glorifica a tu Hijo para que él, a su vez, te dé la gloria a ti. 2 Pues le has dado a tu Hijo autoridad sobre todo ser humano. Él da vida eterna a cada uno de los que tú le has dado. 3 Y la manera de tener vida eterna es conocerte a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien tú enviaste a la tierra. 4 Yo te di la gloria aquí en la tierra, al terminar la obra que me encargaste. 5 Ahora, Padre, llévame a la gloria que compartíamos antes de que comenzara el mundo. 13 »Ahora voy a ti. Mientras estuve con ellos en este mundo, les dije muchas cosas para que estuvieran llenos de mi alegría. 14 Les he dado tu palabra, y el mundo los odia, porque ellos no pertenecen al mundo, así como yo tampoco pertenezco al mundo. 15 No te pido que los quites del mundo, sino que los protejas del maligno. 16 Al igual que yo, ellos no pertenecen a este mundo. NTV.
Ellos, el remanente que me diste, fueron instalados en el hogar, en la iglesia de la que Yo soy cabeza, la Iglesia, en que nacen los hijos de Dios aquí en la tierra, para que Cristo Jesús, ministrando desde el corazón, de los redimidos, justificados, regenerados, nacidos de nuevo, por el poder del Espíritu Santo, son enseñados a vivir, conforme al propósito de Dios Padre, para que aprendan a vivir, desde ahora, de la manera como se vive en el cielo.
Romanos 8: 1/5 Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús; 2 y porque ustedes pertenecen a él, el poder[a] del Espíritu que da vida los[b] ha libertado del poder del pecado, que lleva a la muerte. 3 La ley de Moisés no podía salvarnos, porque nuestra naturaleza pecaminosa[c] es débil. Así que Dios hizo lo que la ley no podía hacer. Él envió a su propio Hijo en un cuerpo como el que nosotros los pecadores tenemos; y en ese cuerpo, mediante la entrega de su Hijo como sacrificio por nuestros pecados, Dios declaró el fin del dominio que el pecado tenía sobre nosotros. 4 Lo hizo para que se cumpliera totalmente la exigencia justa de la ley a favor de nosotros, que ya no seguimos a nuestra naturaleza pecaminosa sino que seguimos al Espíritu. NTV.
El Saldo, que encontró el Salvador, como resultado de la depuración, que los liberó de la epidemia "mundial" del pecado, recibió la más grande de las experiencias, la experiencia del amor, la única experiencia que les "cambio", la existencia, dando lugar a la vida; lo inimaginable y utópico, sucedió, al permanecer unos cuidando a los otros, proveyendo, cuidado, escuchando, conociéndose a si mismos y conociendo a sus cercanos; no hay nada que supere esta experiencia.
Colosenses 3: 12/17 12 Son elegidos de Dios; él los ha consagrado y les ha otorgado su amor. Sean, pues, profundamente compasivos, benignos, humildes, pacientes y comprensivos. 13 Sopórtense mutuamente y, así como el Señor los perdonó, perdónense también ustedes, cuando alguno tenga quejas contra otro. 14 Y, por encima de todo, practiquen el amor que todo lo vuelve perfecto. 15 Que la paz de Cristo reine en sus vidas; a ella los ha llamado Dios para formar un solo cuerpo. Y sean agradecidos. 16 Que el mensaje de Cristo los llene con toda su riqueza y sabiduría para que sean maestros y consejeros los unos de los otros, cantando a Dios salmos, himnos y canciones inspiradas con un corazón profundamente agradecido. 17 En fin, cuanto hagan o digan, háganlo todo en nombre de Jesús, el Señor, dando gracias a Dios Padre por medio de él. BLPH.
Quién, o qué, de lo que El Creador, hizo, en el orden espiritual, o físico, podrá frustrar lo que los hijos, el remanente, los elegidos, del Padre, hacen conforme a su Voluntad, y dentro de la multiforme manifestación de Su Voluntad, que siempre se lleva a efecto en cada uno de los amados que recibieron propósito dentro de sus Planes, para la realización de sus vidas, aquí, en la tierra y en el tiempo venidero en el hogar celestial; ellos jamás serán victimas de la naturaleza humana vaciá, odiosa, egocentrista.
2 de Corintios 4: 1/10 Por lo tanto, ya que Dios, en su misericordia, nos ha dado este nuevo camino,[a] nunca nos damos por vencidos. 2 Rechazamos todas las acciones vergonzosas y los métodos turbios. No tratamos de engañar a nadie ni de distorsionar la palabra de Dios. Decimos la verdad delante de Dios, y todos los que son sinceros lo saben bien.
3 Si la Buena Noticia que predicamos está escondida detrás de un velo, solo está oculta de la gente que se pierde. 4 Satanás, quien es el dios de este mundo, ha cegado la mente de los que no creen. Son incapaces de ver la gloriosa luz de la Buena Noticia. No entienden este mensaje acerca de la gloria de Cristo, quien es la imagen exacta de Dios.
5 Como ven, no andamos predicando acerca de nosotros mismos. Predicamos que Jesucristo es Señor, y nosotros somos siervos de ustedes por causa de Jesús. 6 Pues Dios, quien dijo: «Que haya luz en la oscuridad», hizo que esta luz brille en nuestro corazón para que podamos conocer la gloria de Dios que se ve en el rostro de Jesucristo. NTV. Negrilla agregada por V.de.C.