Amado, ...
Mateo 7: 1/6 »No se conviertan en jueces de los demás, y así Dios no los juzgará a ustedes. 2Si son muy duros para juzgar a otras personas, Dios será igualmente duro con ustedes. Él los tratará como ustedes traten a los demás.
3»¿Por qué te fijas en lo malo que hacen otros, y no te das cuenta de las muchas cosas malas que haces tú? Es como si te fijaras que en el ojo del otro hay una basurita, y no te dieras cuenta de que en tu ojo hay una rama. 4¿Cómo te atreves a decirle a otro: “Déjame sacarte la basurita que tienes en el ojo”, si en tu ojo tienes una rama? 5¡Hipócrita! Primero saca la rama que tienes en tu ojo, y así podrás ver bien para sacar la basurita que está en el ojo del otro.
6»No den a los perros las cosas que pertenecen a Dios, ni echen delante de los cerdos lo que para ustedes es más valioso. Los cerdos no sabrán apreciar su valor, y los perros pueden morderlos a ustedes. TLA.
... por ser pecado, el juicio entre semejantes, que los vierte e invierte en el infierno; !Oh tragedia! ciega en que los creados toman con soberbia el lugar del Creador, ausentes por engaño, de las dimensiones en que Dios es Santo, Justo, es Amor; ignorantes por lo fatuo del "conocimiento", sobre el hecho en que la Santidad de Dios es absolutamente libre de pecado, en que la Justicia de Dios es el perfecto equilibrio de la balanza, que tiene por "columna" de los platillos, el Amor, que es la perfección en que conocemos Su Carácter.
Lucas 6: 36/38 37»No juzguen a otros, y Dios no los juzgará a ustedes. No condenen a otros, y Dios no los condenará a ustedes. Perdonen, y Dios los perdonará. 38Den a otros, y Dios les dará a ustedes. Les dará en su bolsa una medida buena, apretada, sacudida y repleta. Con la misma medida con que ustedes den a otros, Dios les devolverá a ustedes.» DHH.
Los seres humanos sumergidos en las corazas que utilizan como vestido, para maquillar su alternar con otros, disfrutan maliciosamente desde su trinchera, proyectando la "desconocida" verdad de lo que se esconde dentro de la coraza, resaltando de otros, lo que al ser resaltado, es doble pecado, pues la reseña, ¿no es acaso prueba del "conocimiento"-pensamiento- que se ha anidado en la conciencia que es usada como cañón preparado con la "pólvora" del propio pecado, "disparado" contra la desprevenida victima, que escarnecida cae, mientras el cínico disfruta?
Romanos 2: 20/24 20Crees que eres el instructor de los ignorantes y el maestro de los principiantes. Tienes la ley y por eso piensas que tienes toda la verdad y lo sabes todo. 21Entonces, ¿por qué en lugar de enseñar a otros no te enseñas a ti mismo? Tú le dices a la gente que robar no está bien, pero robas. 22Dices que no se debe cometer adulterio, pero cometes ese pecado. Dices que detestas a los ídolos, pero entras a los templos a robarte esos ídolos. 23Te sientes muy orgulloso de decir que conoces la ley de Dios, pero deshonras a Dios cuando no la cumples. 24Por eso está escrito: «Los que no son judíos insultan a Dios por culpa de ustedes». PDT.
La verdad de la que Dios es autor, porque Dios es la Verdad, nos enseña los principios inviolables en que la Justicia Divina se cumple; principios que envuelven desde "arriba", las normas y reglamentos que la sociedad y la religion han implementado para "practicar justicia"; porque ante Dios todos los seres humanos comparten la misma naturaleza caída, pecaminosa sin excepción, ni acepción; son todos; uno por uno, compareciendo ante la Santidad, La Justicia y el amor perfectos de Dios, para responder, no por la caparazón, sino por su intima, su "desnuda" conciencia.
Romanos 3: 10/20 10Como está escrito: «¡No hay ni uno solo que sea justo! 11No hay quien entienda; no hay quien busque a Dios. 12Todos se desviaron, a una se han corrompido. No hay quien haga lo bueno, ¡no hay ni siquiera uno! 13Su garganta es un sepulcro abierto, y con su lengua engañan. ¡En sus labios hay veneno de serpientes! 14Su boca está llena de maldición y de amargura. 15Sus pies son veloces para derramar sangre. 16Destrucción y desgracia hay en sus caminos, 17Y no conocen el camino de la paz. 18No hay temor de Dios delante de sus ojos.» RVC.
La desmitificación de los seres humanos como "autoridad", de la que se valen para asumir el rol de jueces en el orden espiritual, ocurre frente a al cruz del calvario; Cristo Jesús crucificado, le muestra a cada una de sus criaturas, que es pecado, esa palabra se hace individual y en lo individual, le revela lo que realmente "es"; conoce el inenarrable y corrupto poder que ha ejercido como instrumento de las tinieblas, usando la mente-anima- y el cuerpo, a tal nivel de descomposición, que será testigo del infierno al que estaba destinado; de hecho morirá y desde este paradigma, volverá a nacer.
Romanos 5: 6/10 6Cuando éramos totalmente incapaces de salvarnos, Cristo vino en el momento preciso y murió por nosotros, pecadores. 7Ahora bien, casi nadie se ofrecería a morir por una persona honrada, aunque tal vez alguien podría estar dispuesto a dar su vida por una persona extraordinariamente buena; 8pero Dios mostró el gran amor que nos tiene al enviar a Cristo a morir por nosotros cuando todavía éramos pecadores. 9Entonces, como se nos declaró justos a los ojos de Dios por la sangre de Cristo, con toda seguridad él nos salvará de la condenación de Dios. 10Pues, como nuestra amistad con Dios quedó restablecida por la muerte de su Hijo cuando todavía éramos sus enemigos, con toda seguridad seremos salvos por la vida de su Hijo. NTV.