Inerte, ...

Santiago 2: 26 26De manera que así como un cuerpo que no tiene espíritu está muerto, así también una fe que no tiene hechos está muerta. PDT. 17pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas, ciertamente morirás.» Génesis 2: 17. CST.

... por inanimado, es el termino genérico usado para "decir que alguien esta muerto"; el cuerpo inerte perdió todas las propiedades que tenia, no "se mueve", dejo de existir, perdió la capacidad de relacionarse con el "mundo", especialmente con sus semejantes; perdió la capacidad para "imitar" todo lo que "veía hacer" a los demás , incluida la imitación de lo que otros llaman amor; en fin perdió la movilidad, único y final recurso con el que se relacionaba con otros; por todo esto la excelencia del conocimiento de los seres humanos, concluye; la inercia, la muerte es el final, en "ella" se da por terminada la existencia, después de "esto" no hay nada mas.

Mateo 22: 32 32“Yo soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob”? ¡Y él no es Dios de muertos, sino de vivos! DHH. 23Que el Dios de la paz os conceda vivir totalmente consagrados a él, de modo que todo vuestro ser —espíritu, alma y cuerpo— permanezca sin tacha para el día en que se manifieste nuestro Señor Jesucristo. 1 de Tesalonicenses 5: 23 BLP.

El reino de las tinieblas deja correr el liquido que se derrama de las mentes-almas- que sostiene los cuerpos en movimiento, para mantener en funcionamiento el sistema social y religioso, que se mantiene negociando con lo desconocido, asociado en general con los fantasmas, lo "extrasensorial", durante el tiempo en que sus cuerpos se mueven, es decir sus "creencias", expresadas emocionalmente, sentimentalmente, circunstancialmente, duran mientras existe el cuerpo, sus dioses y diosas y claro su "ente religioso", dejan de existir cuando sus cuerpos "mueren", en cumplimiento de la conducta humana "generalmente aceptada", que se basa en el cuerpo que "se mueve".

Mateo 22: 23/30 23Ese mismo día, se acercaron a Jesús algunos saduceos, líderes religiosos que dicen que no hay resurrección después de la muerte. Le plantearon la siguiente pregunta: 24—Maestro, Moisés dijo: “Si un hombre muere sin haber tenido hijos, su hermano debe casarse con la viuda y darle un hijo para que el nombre del hermano continúe”[a]. 25Ahora bien, supongamos que había siete hermanos. El mayor se casó y murió sin dejar hijos, entonces su hermano se casó con la viuda. 26El segundo hermano también murió, y el tercero se casó con ella. Lo mismo sucedió con los siete. 27Por último, la mujer también murió. 28Entonces dinos, ¿de quién será esposa en la resurrección? Pues los siete estuvieron casados con ella. 29Jesús contestó: —El error de ustedes es que no conocen las Escrituras y no conocen el poder de Dios. 30Pues cuando los muertos resuciten, no se casarán ni se entregarán en matrimonio. En este sentido, serán como los ángeles del cielo. NTV.
La existencia en este mundo se basa en el cuerpo, que es el instrumento para cometer el pecado inundado por la disuelta mente que sostiene la muerte espiritual; cuerpo y alma-mente-; el poder de Dios "desmoleculiza" el cuerpo puramente físico, el cuerpo del que los religiosos maliciosos se valen para fornicar, adulterar, aprobar y sostener relaciones que violan la creación Dios, es decir van contra la naturaleza masculina y la femenina, en complicidad con la gama de aberraciones que son parte del estilo de vida social; Dios le devuelve la forma original a la mente que es la estancia solida, desde la que lo finito de la existencia, se recrea en lo infinito de su creador. -Romanos 1: 18/32-

Romanos 7: 24/25 24¡Desdichado de mí! ¿Quién me librará del poder de la muerte que está en mi cuerpo? 25Solamente Dios, a quien doy gracias por medio de nuestro Señor Jesucristo. En conclusión: yo entiendo que debo someterme a la ley de Dios, pero en mi debilidad estoy sometido a la ley del pecado. DHH. 13No entreguen su cuerpo al pecado, como instrumento para hacer lo malo. Al contrario, entréguense a Dios, como personas que han muerto y han vuelto a vivir, y entréguenle su cuerpo como instrumento para hacer lo que es justo ante él. 14Así el pecado ya no tendrá poder sobre ustedes, pues no están sujetos a la ley sino a la bondad de Dios. Romanos 6: 13/14. DHH.

En la inercia de los muertos que caminan es imposible la intimidad, pues la intimidad se explica en la relación "viva" que se origina en el Creador que es Espíritu, relación que conocieron por tiempo ilimitado los primeros creados hombre y mujer, que crecían en su intimidad con Dios, "sin necesidad de relaciones sexuales para dejar descendencia carnal"; en el milagro de la Gracia de Dios realizado en la cruz y en la tumba vacía, se restaura el cuerpo espiritual, "moleculizado" a la imagen de su creador, para habitar en casa, en la que la intimidad no se reduce a la practica de contactos físicos de los órganos genitales; en el que la intimidad es el nivel celestial de la armonía espiritual.

Romanos 8: 1/8 Por lo tanto, ya no hay condenación para los que pertenecen a Cristo Jesús; 2y porque ustedes pertenecen a él, el poder[a] del Espíritu que da vida los[b] ha libertado del poder del pecado, que lleva a la muerte. 3La ley de Moisés no podía salvarnos, porque nuestra naturaleza pecaminosa[c] es débil. Así que Dios hizo lo que la ley no podía hacer. Él envió a su propio Hijo en un cuerpo como el que nosotros los pecadores tenemos; y en ese cuerpo, Dios declaró el fin del dominio que el pecado tenía sobre nosotros mediante la entrega de su Hijo como sacrificio por nuestros pecados. 4Lo hizo para que se cumpliera totalmente la exigencia justa de la ley a favor de

nosotros, que ya no seguimos a nuestra naturaleza pecaminosa sino que seguimos al Espíritu. 5Los que están dominados por la naturaleza pecaminosa piensan en cosas pecaminosas, pero los que son controlados por el Espíritu Santo piensan en las cosas que agradan al Espíritu. 6Por lo tanto, permitir que la naturaleza pecaminosa les controle la mente lleva a la muerte. Pero permitir que el Espíritu les controle la mente lleva a la vida y a la paz. 7Pues la naturaleza pecaminosa es enemiga de Dios siempre. Nunca obedeció las leyes de Dios y jamás lo hará. 8Por eso, los que todavía viven bajo el dominio de la naturaleza pecaminosa nunca pueden agradar a Dios.
NTV.

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