!! venganza !!, ...

Salmo 94: 1-7 1SEÑOR, tú eres el Dios que ejecutas la venganza. Brilla, ¡Dios de venganza! 2¡Levántate Juez de la tierra, y dale su merecido a los orgullosos! 3¿Hasta cuándo, SEÑOR, seguirán tan tranquilos los perversos?4¿Hasta cuándo seguirán todos esos criminales festejando y celebrando el mal que hacen? 5SEÑOR, ellos le hacen daño a tu pueblo; hacen sufrir a tu gente. 6Matan a las viudas y a los inmigrantes; asesinan a los huérfanos. 7Dicen que el SEÑOR no se da cuenta del mal que hacen, que el Dios de Jacob no se entera de lo que sucede. PDT. 

... es el fundamento humano de su inherente injusticia, la natural y entregada disposición para cometer, aquellos actos que son la base de sus experiencias, pero en el aberrante desafío de la mas pequeña inteligencia, aquellos actos que de ninguna manera, se pueden cometer contra ellos, porque de ser así, ensoberbecen los crímenes cometidos, preparando otros mayores para, como se dicen, y se convencen; tomar venganza de los ofensores, enmohecidos por la carcoma de sus viles, atroces injusticias contra los niños, los socios, los ancianos, ...

Romanos 12: 17/20 17 No paguemos a nadie mal por mal. Procuremos hacer lo bueno a los ojos de todo el mundo. 18 Si es posible, y en cuanto dependa de nosotros, vivamos en paz con todos. 19 No busquemos vengarnos, amados míos. Mejor dejemos que actúe la ira de Dios, porque está escrito: «Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.» 20 Por lo tanto, si nuestro enemigo tiene hambre, démosle de comer; si tiene sed, démosle de beber. Si así lo hacemos, haremos que éste se avergüence de su conducta. RVC.

La sumamente corta, obvia, intrascendente, flagrante naturaleza humana, enmarcada en pecado, injusticia, ulula el desvarió, de lo que llama hacer justicia, encerrando en cárceles a los pisoteados, que tienen que permanecer en ellas por los realmente merecedores de ocuparlas son los que tienen las llaves; apertura al escenario del mundo que, cobra venganza con odio pecador, de aquellos que no "se han dejado" envilecer, hasta donde han querido, los protocolarios señores de la perversion, depravación, satirismo, corrupción.

Ezequiel 25: 15/17 15 Así ha dicho Dios el Señor: «La venganza de los filisteos fue artera. Por causa de antiguas enemistades destruyeron a Judá.» 16 Por eso, así ha dicho el Señor: «Voy a extender mi mano contra los filisteos. Acabaré con esos cretenses, y destruiré a los que aún queden en la costa del mar. 17 Grande será mi venganza contra ellos, y las reprensiones de mi ira. Cuando me vengue de ellos, sabrán que yo soy el Señor.» RVC. 

Notoria es la consumación de la justicia, conforme a la injusticia que preña a los seres humanos, y es por demás, tan eficaz, como los que la ejecutan; es en extremo corto el tiempo en que el vengador, usa de su pecado-injusticia-para propinar causas de satisfacción al perpetrador, por muy horribles y causantes de todo lo que aterroriza a los humanos, es como la flor de un día, en tanto el mandamiento del Creador, de no tomar venganza, se explica en que quién se atreva, a blasfemarlo, sufrirá sin tiempo, ni medida, eternamente.

Judas 1: 5/9 5 Aunque ustedes ya lo saben, quiero recordarles que cuando el Señor salvó al pueblo y lo sacó de Egipto, destruyó a los que no creyeron. 6 Incluso a los ángeles que no cuidaron su dignidad, sino que abandonaron su propia mansión, los ha retenido para siempre en prisiones oscuras, para el juicio del gran día. 7 También Sodoma y Gomorra, y las ciudades vecinas, que lo mismo que aquéllos practicaron la inmoralidad sexual y los vicios contra la naturaleza, fueron puestas como ejemplo y sufrieron el castigo del fuego eterno. 8Así mismo, también estos hombres, en sus sueños, contaminan su cuerpo, rechazan la autoridad y blasfeman de los poderes superiores. 9 Pero ni siquiera el arcángel Miguel, cuando luchaba con el diablo y le disputaba el cuerpo de Moisés, se atrevió a proferir contra él juicio de maldición, sino que le dijo: «Que el Señor te reprenda.» RVC. 

El mas grande encubrimiento de la Verdad, que caracteriza a satanás, es su propio castigo, la ira de Dios desatada sobre él, el hecho sin que podamos entenderlo en su real dimensión, de recibir, no la venganza como concepto, sino el escarmiento, como suficiente retribución por el mal causado, a tal nivel de culpabilidad  de inconmensurable daño, que pasará la eternidad sin fin, inmerso en los efectos del infierno, la espantosa realidad, de no tener la posibilidad de alivio, consecuencia de haber pecado contra su Creador.

Mateo 23: 13/15 13 »Pero ¡ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! Porque le niegan a la gente la entrada al reino de los cielos, y ni ustedes entran, ni tampoco dejan entrar a los que quieren hacerlo. 14 [¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! Porque devoran las casas de las viudas, y como pretexto hacen largas oraciones. Por esto, mayor será su condenación.][a] 15 ¡Ay de ustedes, escribas y fariseos, hipócritas! Porque recorren mar y tierra en busca de seguidores, y una vez que los consiguen, los hacen dos veces más hijos del infierno que ustedes. RVC.