! confusión !, ...
Hechos 19: 30/34 30Pablo quiso entrar para hablar con la gente, pero los seguidores de Jesús no se lo aconsejaron. 31Además, algunos amigos de Pablo, autoridades del lugar, le mandaron a decir que no debía entrar.32Mientras tanto, en el teatro todo era confusión. La gente se puso a gritar, aunque algunos ni siquiera sabían para qué estaban allí. 33Varios de los líderes judíos empujaron a un hombre, llamado Alejandro, para que pasara al frente y viera lo que pasaba. Alejandro levantó la mano y pidió silencio para defender a los judíos. 34Pero, cuando se dieron cuenta de que Alejandro también era judío, todos se pusieron a gritar durante casi dos horas: «¡Viva Artemisa, la diosa de los efesios!» TLA. Negrilla agregada por V.de.C.
… es el principio en que opera el sistema religioso; no puede ser entendido de otra manera, pues su fundador, el dios de este mundo, es semblanza exacta de la confusion, del caos, del alucinamiento, que enajena las mentes-almas- de los seres humanos que por su impávida, horrorosa situación, "se mueven" erráticamente conforme a la maquinación maliciosa de satanás, sin que su "individualidad", tome partido en nada; no saben, ni sabrán en donde están y porqué están "ahí".
Romanos 1: 20 20 Pues, desde la creación del mundo, todos han visto los cielos y la tierra. Por medio de todo lo que Dios hizo, ellos pueden ver a simple vista las cualidades invisibles de Dios: su poder eterno y su naturaleza divina. Así que no tienen ninguna excusa para no conocer a Dios. NTV. 33 porque Dios no es un Dios de confusión, sino de paz como en todas las iglesias del pueblo de Dios.1 de Corintios 14: 32/33 PDT.
La gente embargada por la confusion, yerra, dejando que las situaciones tumultuosas, puedan ser valoradas, pues el criterio que es esencia de la Persona, no existe, es imposible entender lo que Dios dice a través de Pablo, siempre toma la primacía el bochinche de tamaño mayor, el que como un torrente arrastra a los incautos, para que los cautos infernales, los hagan participes de las vociferaciones diabólicas a "nuestra señora, la diosa de los efesios"
Hechos 17: 17/22 17 Habló en la sinagoga con los judíos y con los que no eran judíos que creían en el Dios verdadero. También hablaba diariamente con la gente que estaba en la plaza de mercado de la ciudad. 18 Algunos filósofos epicúreos y estoicos empezaron a discutir con él. Unos decían: «¿Qué es lo que dice ese charlatán?» Otros decían: «Parece que está hablando de otros dioses» porque Pablo estaba hablando de «Jesús» y de la «Resurrección». [a] 19 Entonces llevaron a Pablo a una reunión del Concejo de la ciudad [b] y le dijeron:
—Queremos que nos expliques esta nueva enseñanza que estás presentando. 20 Lo que dices es nuevo para nosotros, nunca habíamos escuchado eso antes y queremos saber qué significan estas nuevas enseñanzas. 21 Todos los atenienses y los inmigrantes que vivían allí ocupaban siempre su tiempo escuchando o hablando de las ideas nuevas que surgían. 22 Entonces Pablo se levantó ante la reunión del Concejo de la ciudad y dijo: —Atenienses, me doy cuenta de que ustedes son muy religiosos en todo. PDT.
Aturdidos por el desconcierto que causa la confusion, los seres humanos, terminan consagrados a la más profunda oscuridad, inscritos en el pasaporte que los hace dignos de entrar al infierno, en medio del aturdimiento, se asombran de las monumentales obras cargadas de "arte y diseño", tan demoledoras en su aspecto, que las consideran dignas de la unica deidad en que creen, y las consagran al vientre de Eva, a la madre que por ser "común" a todos, es nuestra señora.
Hechos 19: 23/27 23Por aquel tiempo, los seguidores de Jesús tuvieron un gran problema, 24 provocado por un hombre llamado Demetrio. Este hombre se dedicaba a fabricar figuras de plata, y él y sus ayudantes ganaban mucho dinero haciendo la figura del templo de la diosa Artemisa. 25 Demetrio se reunió con sus ayudantes, y también con otros hombres que se dedicaban a hacer cosas parecidas, y les dijo:
«Amigos, ustedes saben cuánto necesitamos de este trabajo para vivir bien. 26 Pero, según hemos visto y oído, este hombre llamado Pablo ha estado alborotando a la gente de Éfeso y de toda la provincia de Asia. Según él, los dioses que nosotros hacemos no son dioses de verdad, y mucha gente le ha creído. 27 Pablo no sólo está dañando nuestro negocio, sino que también le está quitando fama al templo de la gran diosa Artemisa. Hasta el momento, ella es amada y respetada en toda la provincia de Asia y en el mundo entero, pero muy pronto nadie va a querer saber nada de ella.» TLA.
El descomunal negocio que supone el sistema religioso, hecho pequeñas y medianas y grandes empresa religiosas, "mueve exorbitantes cantidades de dinero", parta mantener la estructura de la confusión que es evidencia de la muerte latente en las criaturas, que no saben que su "estado" es fruto del pecado imperdonable de la idolatría, las criaturas que guturizan vocablos como cristiano, pronunciados mientras son victimas del aquelarre dentro del templo de "señora nuestra".
Los cultos de dulia, celebración que adora a los seres espirituales creador por Dios, igual de que los números demás cultos que celebran los seres humanos en los enormes templos consagrados a la "señora de todos", es la común práctica de alucinamiento, de la que quien pronuncia el nombre del Creador Cristo Jesus, como los cristianos, fueran, parte asistiera a tales cultos, manifestaciones de la devoción a los demonios, sella su pasaporte con la "visa que lo hace parte del infierno".
Jeremias 44: 24/30 24 Luego me dirigí al pueblo, sobre todo a las mujeres, y añadí: —Ustedes, gente de Judá que vive en Egipto, escuchen bien lo que Dios les dice: 25 “Yo soy el Dios de Israel. Me doy cuenta de que ustedes y sus mujeres cumplen sus promesas de adorar a la Reina del cielo, y de presentarle ofrendas. ¡Muy bien! ¡Sigan cumpliendo sus promesas! ¡Sigan haciendo lo que les dé la gana! 26 Ustedes son de Judá, y ahora viven en Egipto. Pues escúchenme bien: yo les juro que ninguno de ustedes volverá a jurar aquí usando mi nombre. Nadie volverá a decir: ‘¡Lo juro por el Dios de Israel!’ 27 En vez de vigilarlos para protegerlos, voy a vigilarlos para hacerles daño. Les aseguro que toda la gente de Judá que vive en Egipto morirá de hambre, o en la guerra. 28 ¡Y van a ver todos ustedes si cumplo o no mi palabra! Unos cuantos se salvarán de la guerra y del hambre, y podrán regresar a Judá; pero la mayoría de los que se fueron a Egipto, morirán. TLA.