! Pacto !, ...
Isaias 24: 4/6 4 La tierra se seca y se marchita. El mundo languidece y se marchita. Los de la alta sociedad languidecen. BLP. 5 La tierra sufre por los pecados de sus habitantes, porque han torcido las instrucciones de Dios, han violado sus leyes y quebrantado su pacto eterno. 6 Por lo tanto, una maldición consume la tierra; sus habitantes tienen que pagar el precio por su pecado. El fuego los destruye, y solo unos cuantos quedan con vida. NTV. 7 No se dejen engañar: nadie puede burlarse de la justicia de Dios. Siempre se cosecha lo que se siembra. Galatas 6: 7 NTV.
... eterno es el que le ofreció El Creador a sus criaturas desde el Genesis y se confirma en el Apocalipsis; pacto de vida eterna, como "corrección" del pacto que la humanidad firmó con el diablo para comprometerlos a acompañarlo eternamente en el infierno; el pacto que si era, es aceptado, cambia la maldición en Bendición, el pacto con el que "Dios Jura" cambiar la muerte en vida, para los que lleguen a discernir en sus existencias la maldición del pecado.
Isaias 28: 15 15 Ustedes dicen: «Hemos hecho un pacto con la muerte, un contrato con el reino de los muertos, para que cuando venga la terrible calamidad, no nos alcance; hemos buscado refugio en las mentiras, protección en el engaño.» DHH. 44 Pues ustedes son hijos de su padre, el diablo, y les encanta hacer las cosas malvadas que él hace. Él ha sido asesino desde el principio y siempre ha odiado la verdad, porque en él no hay verdad. Cuando miente, actúa de acuerdo con su naturaleza porque es mentiroso y el padre de la mentira. Juan 8: 44. NTV.
Quebrantar el pacto eterno, consecuencia de la conducta que viola las leyes de Dios que explican la Santidad la Justicia y el Amor; es el pecado que prevalece, es la muerte que busca reinar, aplastando la santidad, que es al vida; es el pacto de muerte firmado por Adan y Eva, que se transfiere irremediablemente a sus hijos desde entonces hasta el final, cubriendo de oscuridad, la Gracia, el Amor de Dios, que fue consumado por Cristo Jesús en la cruz, y en la tumba vaciá.
Hebreos 6: 17/19 17 De igual manera, Dios quería demostrar que su promesa era confiable y que la gente iba a recibir lo prometido. Dios dijo que algo sucedería y lo afirmó con una promesa. 18 Hay dos cosas imposibles: que Dios mienta y que no cumpla lo que promete. Esas dos cosas nos dan confianza a los que nos hemos refugiado en él. Nos fortalecen para continuar en la esperanza que Dios nos da. 19 Tenemos esa esperanza tan fuerte y segura como un ancla que sostiene el alma. Nuestra esperanza llega más allá de la cortina [a] del Lugar Santísimo del cielo. PDT.
La excepciones que El Creador nos muestra en las biografías de los hombres y mujeres que renegaron del pacto magnicida del demonio, para restaurar el Pacto de Vida Eterna que es Dios mismo, pasando muerte a vida, es decir quedando libres de la maldición y ser hechos parte de la Bendición Eterna, tienen fundamento en el conocimiento de Dios, resultado de sus encuentros personales con Su Señor Cristo Jesús, fundamento que sostuvo a Pedro a pesar de su abjuración, de su apostasía..
Mateo 26: 73/74 73 Un poco más tarde, algunos de los otros que estaban allí se acercaron a Pedro y dijeron: —Seguro que tú eres uno de ellos; nos damos cuenta por el acento galileo que tienes. 74 Pedro juró: —¡Que me caiga una maldición si les miento! ¡No conozco al hombre! Inmediatamente, el gallo cantó. 75 De repente, las palabras de Jesús pasaron rápidamente por la mente de Pedro: «Antes de que cante el gallo, negarás tres veces que me conoces». Y Pedro salió llorando amargamente. NTV.
Dios es la forma en que entendemos qué significa Jurar, porque el Es el Juramento Absoluto; todo lo que nos es revelado de El, es la Eterna Verdad de la que El mismo es quien Jura; porque Jurar es Verdad, lo opuesto a la mentira; la obra del dios de este mundo, consistió desde el principio en incitar a perjurar, que es mentir, a los que conocieron por inherencia la Verdad, es decir lo que Dios quiso que fuera, fué, en lo infalible, sin detrimento o variación.
Hebreos 6: 13/15 13 Cuando Dios hizo la promesa a Abraham, juró por sí mismo, porque no había otro superior a él por quien jurar; 14 y dijo: «Sí, yo te bendeciré mucho y haré que tu descendencia sea numerosa.» 15 Abraham esperó con paciencia, y recibió lo que Dios le había prometido. DHH. 33 »También han oído que a nuestros antepasados se les dijo: “No rompas tus juramentos; debes cumplir con los juramentos que le haces al Señor”[a]. 34 Pero yo digo: ¡no hagas juramentos! No
digas: “¡Por el cielo!”, porque el cielo es el trono de Dios. 35 Y no digas: “¡Por la tierra!”, porque la tierra es donde descansa sus pies. Tampoco digas: “¡Por Jerusalén!”, porque Jerusalén es la ciudad del gran Rey. 36 Ni siquiera digas: “¡Por mi cabeza!”, porque no puedes hacer que ninguno de tus cabellos se vuelva blanco o negro. 37 Simplemente di: “Sí, lo haré” o “No, no lo haré”. Cualquier otra cosa proviene del maligno. Mateo 5: 33/37 NTV.