No hay, ...
Hechos 9: 5/6 Saulo preguntó: —¿Quién eres, Señor? La voz le contestó: —Soy Jesús, a quien tú persigues. Levántate y vete a la ciudad. Allí se te dirá qué tienes que hacer. PDT.
... cambio en la simple existencia, la existencia no crece, se ve siempre igual, su aspecto es enano, no hay señal de progreso que se explica en la madurez, su estado es explicable en que no puede aunque quiera "cambiar" su realidad porque no sabe "que tiene que hacer".
Efesios 4: 14/16 Así no nos portaremos como niños, ni seremos como un barco a la deriva arrastrados por cualquier nueva enseñanza de quienes buscan engañarnos con sus trampas. Por el contrario, maduraremos y seremos como Cristo en todo sentido, enseñando la verdad con amor. Cristo es la cabeza, y el cuerpo entero depende de él. Por medio de él, todas las partes del cuerpo están ligadas y se mantienen unidas. Cada parte cumple su función y así todo el cuerpo crece y se fortalece por el amor. PDT.
El sistema religioso como cualquier otro sistema creado por el hombre, es incapaz de hacer cambios en el hombre; porque lo que es diseñado por el hombre como medio para encontrar objetivo y propósito en su discurrir por este mundo es producto de su naturaleza caída.
El muy calificado religioso doctor Saulo de Tarso, trataba de encontrar propósito a su existencia, cumpliendo con el objetivo religioso de matar y encarcelar cristianos, agregando a su estado mayor pecado, fortaleciendo su condición de muerto espiritual.
Pero cuando la vida le es restaurada, durante su encuentro personal con Cristo Jesús, su existencia muerta termino, murió, y dio lugar al nacimiento del apóstol Pablo, ¡que cambio¡ tan inconmensurable como lo es pasar de muerte a Vida, vida en la que todo es nuevo cada día, su aspecto cambia, crece, madura.
Hechos 9: 15/17 Pero el Señor le dijo: «Ve, porque he escogido a ese hombre para que hable de mí a la gente de otras naciones, y a sus reyes, y también a los israelitas. Yo le mostraré lo mucho que tiene que sufrir por mi causa.» Ananías fue a la casa donde estaba Saulo. Al entrar, puso sus manos sobre él, y le dijo: —Hermano Saulo, el Señor Jesús, el que se te apareció en el camino por donde venías, me ha mandado para que recobres la vista y quedes lleno del Espíritu Santo. DHH.
Hermano Saulo, le dice Ananias el humilde siervo del Señor, al altivo, soberbio, orgulloso e infatuado religioso, que se dirigía a matarlo, o a mas no poder llevarlo a Jerusalén para meterlo en la cárcel, es el cambio que ocurre por el poder del Amor de Dios, ahora son hechos uno en Cristo Jesús, son hermanos en la comunión con su Señor y Salvador, dador de la vida y el objetivo y propósito para vivirla eternamente.
Filipenses 3: 4/8 Yo mismo tengo motivos para tal confianza. Si cualquier otro cree tener motivos para confiar en esfuerzos humanos, yo más: circuncidado al octavo día, del pueblo de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de pura cepa; en cuanto a la interpretación de la ley, fariseo; en cuanto al celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que la ley exige, intachable. Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo. Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol, a fin de ganar a Cristo NVI.
... cambio en la simple existencia, la existencia no crece, se ve siempre igual, su aspecto es enano, no hay señal de progreso que se explica en la madurez, su estado es explicable en que no puede aunque quiera "cambiar" su realidad porque no sabe "que tiene que hacer".
Efesios 4: 14/16 Así no nos portaremos como niños, ni seremos como un barco a la deriva arrastrados por cualquier nueva enseñanza de quienes buscan engañarnos con sus trampas. Por el contrario, maduraremos y seremos como Cristo en todo sentido, enseñando la verdad con amor. Cristo es la cabeza, y el cuerpo entero depende de él. Por medio de él, todas las partes del cuerpo están ligadas y se mantienen unidas. Cada parte cumple su función y así todo el cuerpo crece y se fortalece por el amor. PDT.
El sistema religioso como cualquier otro sistema creado por el hombre, es incapaz de hacer cambios en el hombre; porque lo que es diseñado por el hombre como medio para encontrar objetivo y propósito en su discurrir por este mundo es producto de su naturaleza caída.
El muy calificado religioso doctor Saulo de Tarso, trataba de encontrar propósito a su existencia, cumpliendo con el objetivo religioso de matar y encarcelar cristianos, agregando a su estado mayor pecado, fortaleciendo su condición de muerto espiritual.
Pero cuando la vida le es restaurada, durante su encuentro personal con Cristo Jesús, su existencia muerta termino, murió, y dio lugar al nacimiento del apóstol Pablo, ¡que cambio¡ tan inconmensurable como lo es pasar de muerte a Vida, vida en la que todo es nuevo cada día, su aspecto cambia, crece, madura.
Hechos 9: 15/17 Pero el Señor le dijo: «Ve, porque he escogido a ese hombre para que hable de mí a la gente de otras naciones, y a sus reyes, y también a los israelitas. Yo le mostraré lo mucho que tiene que sufrir por mi causa.» Ananías fue a la casa donde estaba Saulo. Al entrar, puso sus manos sobre él, y le dijo: —Hermano Saulo, el Señor Jesús, el que se te apareció en el camino por donde venías, me ha mandado para que recobres la vista y quedes lleno del Espíritu Santo. DHH.
Hermano Saulo, le dice Ananias el humilde siervo del Señor, al altivo, soberbio, orgulloso e infatuado religioso, que se dirigía a matarlo, o a mas no poder llevarlo a Jerusalén para meterlo en la cárcel, es el cambio que ocurre por el poder del Amor de Dios, ahora son hechos uno en Cristo Jesús, son hermanos en la comunión con su Señor y Salvador, dador de la vida y el objetivo y propósito para vivirla eternamente.
Filipenses 3: 4/8 Yo mismo tengo motivos para tal confianza. Si cualquier otro cree tener motivos para confiar en esfuerzos humanos, yo más: circuncidado al octavo día, del pueblo de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de pura cepa; en cuanto a la interpretación de la ley, fariseo; en cuanto al celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que la ley exige, intachable. Sin embargo, todo aquello que para mí era ganancia, ahora lo considero pérdida por causa de Cristo. Es más, todo lo considero pérdida por razón del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por él lo he perdido todo, y lo tengo por estiércol, a fin de ganar a Cristo NVI.