!Oftalmología!
2 Corintios 5: 7 7Vivimos por fe, no por vista. NVI.
Los expertos en salud de los ojos, de todos los tiempos y precursores de los médicos especialistas, oftalmólogos; y de los optómetras, son la autoridad competente para dictaminar en asuntos del sentido de los ojos, y de la perdida o disminución del mismo.
Cuando alguien tiene problemas de "visión", acude a los especialistas, para que se corrija, se resuelva su problema; que logros tan admirables los que le permiten a los hombres recuperar y corregir enfermedades de los ojos, para volver a ver bien, pero no obstante esta realidad, hubo Uno que hablo sobre un problema de "visión", que no tenia que ver con los ojos.
El creador del universo Cristo Jesús, declaró con la autoridad del que diseño el sistema óptico humano, que la humanidad que se proclamaba saludable en su sistema visual, en verdad estaba "ciega", y que esta era la razón de sus múltiples tragedias y sufrimientos. Que desperdicio mirar la vida, en una forma que solo pueda ser entendida, por lo que le revelan los ojos al cerebro.
Lucas 6: 39 39Jesús les puso esta comparación: «¿Acaso puede un ciego servir de guía a otro ciego? ¿No caerán los dos en algún hoyo? DHH. Se trata de la verdad inherente a los seres humanos que nacemos ciegos, sin capacidad para apreciar la vida, mas allá de lo que a duras penas podemos ver.
La visión a la que se refería el Creador, es aquella que el vino a restaurar, es el resultado de volver a contar con el "sistema óptico" espiritual, el que murió, junto con todos nosotros, a manos de Satanás. El Señor, que nos redimió, no solo es el restaurador de nuestros ojos espirituales, sino que es el Unico Oftalmólogo con autoridad, para dictaminar y corregir, toda posible "enfermedad" o oscuridad de los ojos, con los que podemos ver lo que realmente es la vida.
Ver con los ojos que operan por la presencia de Cristo Jesús en el corazón de los creyentes cristianos, es tener la capacidad para proyectar nuestra existencia, en la "Visión de Dios", que esta disponible, para todos los que aceptan y reciben a Cristo Jesús como Señor de sus nuevas y reales vidas.
Juan 14: 6/9 6Jesús le contestó:—Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por medio de mí. 7Si ustedes realmente me conocieran, también sabrían quién es mi Padre. De ahora en adelante, ya lo conocen y lo han visto. 8Felipe le dijo:—Señor, muéstranos al Padre y quedaremos conformes. 9Jesús respondió:—Felipe, ¿he estado con ustedes todo este tiempo, y todavía no sabes quién soy? ¡Los que me han visto a mí han visto al Padre! Entonces, ¿cómo me pides que les muestre al Padre? NTV.
La iglesia en su comienzo vio y conoció "personalmente a su pastor", les fue confirmado, en la resurrección y cuando Ascendió al Cielo, El Padre cumplio la promesa de la que somos todos participes, y que es el principio fundamental en que opera la iglesia sobre la tierra en este tiempo.
Juan 14: 25-26 25Les digo estas cosas ahora, mientras todavía estoy con ustedes. 26Sin embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante —es decir, al Espíritu Santo—, él les enseñará todo y les recordará cada cosa que les he dicho. NTV.
Los expertos en salud de los ojos, de todos los tiempos y precursores de los médicos especialistas, oftalmólogos; y de los optómetras, son la autoridad competente para dictaminar en asuntos del sentido de los ojos, y de la perdida o disminución del mismo.
Cuando alguien tiene problemas de "visión", acude a los especialistas, para que se corrija, se resuelva su problema; que logros tan admirables los que le permiten a los hombres recuperar y corregir enfermedades de los ojos, para volver a ver bien, pero no obstante esta realidad, hubo Uno que hablo sobre un problema de "visión", que no tenia que ver con los ojos.
El creador del universo Cristo Jesús, declaró con la autoridad del que diseño el sistema óptico humano, que la humanidad que se proclamaba saludable en su sistema visual, en verdad estaba "ciega", y que esta era la razón de sus múltiples tragedias y sufrimientos. Que desperdicio mirar la vida, en una forma que solo pueda ser entendida, por lo que le revelan los ojos al cerebro.
Lucas 6: 39 39Jesús les puso esta comparación: «¿Acaso puede un ciego servir de guía a otro ciego? ¿No caerán los dos en algún hoyo? DHH. Se trata de la verdad inherente a los seres humanos que nacemos ciegos, sin capacidad para apreciar la vida, mas allá de lo que a duras penas podemos ver.
La visión a la que se refería el Creador, es aquella que el vino a restaurar, es el resultado de volver a contar con el "sistema óptico" espiritual, el que murió, junto con todos nosotros, a manos de Satanás. El Señor, que nos redimió, no solo es el restaurador de nuestros ojos espirituales, sino que es el Unico Oftalmólogo con autoridad, para dictaminar y corregir, toda posible "enfermedad" o oscuridad de los ojos, con los que podemos ver lo que realmente es la vida.
Ver con los ojos que operan por la presencia de Cristo Jesús en el corazón de los creyentes cristianos, es tener la capacidad para proyectar nuestra existencia, en la "Visión de Dios", que esta disponible, para todos los que aceptan y reciben a Cristo Jesús como Señor de sus nuevas y reales vidas.
Juan 14: 6/9 6Jesús le contestó:—Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie puede ir al Padre si no es por medio de mí. 7Si ustedes realmente me conocieran, también sabrían quién es mi Padre. De ahora en adelante, ya lo conocen y lo han visto. 8Felipe le dijo:—Señor, muéstranos al Padre y quedaremos conformes. 9Jesús respondió:—Felipe, ¿he estado con ustedes todo este tiempo, y todavía no sabes quién soy? ¡Los que me han visto a mí han visto al Padre! Entonces, ¿cómo me pides que les muestre al Padre? NTV.
La iglesia en su comienzo vio y conoció "personalmente a su pastor", les fue confirmado, en la resurrección y cuando Ascendió al Cielo, El Padre cumplio la promesa de la que somos todos participes, y que es el principio fundamental en que opera la iglesia sobre la tierra en este tiempo.
Juan 14: 25-26 25Les digo estas cosas ahora, mientras todavía estoy con ustedes. 26Sin embargo, cuando el Padre envíe al Abogado Defensor como mi representante —es decir, al Espíritu Santo—, él les enseñará todo y les recordará cada cosa que les he dicho. NTV.