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Génesis 39 7/9 7 Al cabo de algún tiempo la mujer de su amo se fijó en José y un día le propuso: — Acuéstate conmigo. 8 Pero José rehusó diciendo a la mujer de su amo: — Mira, mi amo ha dejado a mi cargo todo lo que posee y cuenta conmigo hasta el punto de no preocuparse de nada; 9 en esta casa mando tanto como él; tú eres lo único que me está prohibido, por ser su mujer. ¿Cómo voy a cometer yo tal infamia y pecar contra Dios? BLPH.
... entre los hombres, entre los que están a mi alrededor, no hay nadie mayor que yo, pues aún mi amo, está a mi cuidado, sin embargo mi "estatura entre los hombres", está sometida siempre a mi Señor, a mi Dios, cada acto de mi vida le rinde honor o lo descalifica, lo deshonra, como podría convertirlo en cómplice de mi pecado, cometiendo adulterio con usted, primero contra Potifar, y como consecuencia contra Dios, cayendo en el abismo de creer que un simple hombre puede ser mayor que Dios.
Isaias 51: 12/13 12 «Yo soy quien te consuela. ¿A quién temes, Jerusalén? ¿A un simple mortal? ¿A un ser humano que es como la hierba? 13 ¿Es que te has olvidado del SEÑOR, tu creador, que extendió los cielos y estableció la tierra? ¿Vas a estar temeroso todo el tiempo debido a la furia de tus opresores que están decididos a destruirte? ¿Dónde está esa furia de tus opresores? PDT.
Toda voz, que desconozca nuestra grandeza de carácter practicando el pecado, sera acallada, sin miramientos, sin límites, llegaremos a cualquier extremo, para evitar a quienes nos dejan al descubierto, los que nos desenmascaran de la doblez, en que transcurre nuestra existencia, asesináremos a los niños, el mayor potencial de Dios para conservar el remanente que trascenderá de nuevo al hogar eterno en el cielo, seremos como faraón, en tiempo de Moises, y como herodes luchando contra Cristo Jesús.
Romanos 1: 22/27 22 Se creían sabios, pero sólo eran unos tontos, 23 y cambiaron la grandeza del Dios inmortal para adorar ídolos, hechos con forma de simples hombres mortales, aves, cuadrúpedos y serpientes. 24 La gente estaba llena de pecado y quería hacer solamente el mal, por eso Dios permitió que fueran esclavizados por los pecados sexuales que cometían y deshonraron su cuerpo unos con otros. 25 Cambiaron al verdadero Dios por uno de mentira. Adoraron y sirvieron a la creación en lugar de adorar y servir a Dios, el Creador, a quien sea la honra para siempre. Así sea. 26 Por eso Dios los dejó seguir sus pasiones vergonzosas. Sus mujeres dejaron de tener relaciones sexuales con los hombres, que es lo natural, y empezaron a tener relaciones sexuales con otras mujeres. 27 De la misma forma, los hombres dejaron de tener relaciones sexuales con las mujeres, que es lo natural, y empezaron a desearse entre ellos. Los hombres hicieron cosas vergonzosas con otros hombres, y recibieron en sí mismos el pago merecido por su desviación. PDT.
Aquel poder que ignoramos, pero que es satanás, el autor intelectual el insinuador, el motivador, el animador, de cada uno de los actos con los que satisfacemos nuestra insolente carnalidad, la necia-estúpida-, vagancia, el sopor de la muerte que nos consume, nos descompone cada segundo, llena nuestra mentes-almas- con la seguridad de ser solo nosotros, en lo individual y para nosotros centrados en nosotros mismos únicamente, así que ni Dios, tiene cabida en nuestra lenta, perezosa caída.
Proverbios 19: 14/16 14 La casa y el dinero se heredan de los padres, pero la esposa inteligente es un don del Señor. 15 La pereza conduce al sueño profundo; el holgazán pasará hambre. 16 El que cumple el mandamiento cumple consigo mismo; el que descuida su conducta morirá. CST.
Tenemos pruebas, conocemos las evidencias de nuestro poder, de nuestra caótica beligerancia, inútil, de la pereza, que es simple manifestación de la muerte, y es cierto que la "madre naturaleza, en complicidad con la madre muerte, y las fallas de la suerte, y de los horóscopos y de los versículos dc cada día", han causado desastres, como el diluvio la destrucción de semejante civilización tan libre pensadora como sodoma y gomorra, la muerte del poderoso ejército egipcio, simples casualidades.
Eclesiastés 10: 12/15 12 Las palabras del sabio son placenteras, pero los labios del necio son su ruina;
13 sus primeras palabras son necedades, y las últimas son terribles sandeces. 14 ¡Pero no le faltan las palabras! Nadie sabe lo que ha de suceder, y lo que será aun después, ¿quién podría decirlo? 15 El trabajo del necio tanto lo fatiga que ni el camino a la ciudad conoce. CST.