¿Esto es, ..

1 de Corintios 6: 19/20 ¿No saben que el cuerpo es templo del Espíritu Santo, que Dios les dio, y que el Espíritu habita en ustedes? Ustedes no son sus propios dueños, porque Dios nos compró a gran precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios. NBD. Pues ustedes saben que Dios pagó un rescate para salvarlos de la vida vacía que heredaron de sus antepasados. Y el rescate que él pagó no consistió simplemente en oro o plata sino que fue la preciosa sangre de Cristo, el Cordero de Dios, que no tiene pecado ni mancha. 1 Pedro‬ ‭1‬:‭ 18/19‬ NTV.

... broma verdad? ¿usted afirma que "tengo dueño" y que todas; muchas o pocas, mis posesiones no son mías, sino que le pertenecen al mismo dueño?, si no es una broma, es algo mas serio, es irrespeto es ignorancia atrevida, es falta de inteligencia; que idea mas ridícula; no tiene la mínima posibilidad frente  al hecho de universal aceptación, en que soy mi propio dueño y por tanto el único dueño de todo; mucho o poco de lo que poseo y de lo que espero poseer.

Judas 1: 4 Pues hay unos que se han metido secretamente entre ustedes; de ellos ya se ha dicho en las Escrituras que van a ser condenados. Están en contra de Dios, toman el generoso amor de Dios como excusa para justificar su conducta inmoral y niegan a Jesucristo, nuestro único Señor y Dueño. PDT. Que no se te ocurra pensar: “He alcanzado esta prosperidad gracias a mi esfuerzo y mis propios medios”. Recuerda que ha sido el Señor tu Dios quien te ha dado las fuerzas para obtener esa prosperidad; así ha confirmado hoy la alianza que juró a tus antepasados. Deuteronomio ‭8‬:‭ 17/18‬ BHTI.

Los seres humanos artífices del sistema social y religioso, son por lo mismo sus dueños; todo lo social y lo religioso hace parte de sus muchas o pocas posesiones y son garantía de su soberana autopropiedad y garantes de los documentos con los que limitan como propiedad de cada uno, todo lo que depredadoramente obtienen, fruto de su astucia, es decir su inteligencia, sabiduría y fuerza, por los que pagan según tarifa en lo social y "diezmos" en lo religioso.    

Lucas 18: 9/12 Había unos que creían que siempre hacían el bien. Estaban tan seguros de sí mismos que menospreciaban a los demás. Jesús contó esta historia para ellos: «Dos hombres fueron al templo a orar. Uno era un fariseo y el otro era un cobrador de impuestos. El fariseo, puesto de pie, se puso a orar consigo mismo así: “Dios, te doy gracias porque no soy como los demás. No soy como los ladrones, los injustos, los que cometen el pecado de adulterio, ni tampoco como este cobrador de impuestos. Ayuno dos veces a la semana y doy la décima parte de todo lo que adquiero”. PDT.

Los seres humanos sociales y religiosos son administradores soberanos de su existencia y de los bienes tomados de la tierra, único objetivo y propósito de su existencia, la administración de lo que esta fuera de sus templos o lugares religiosos, los hace administradores, y la entrega de limosnas a los templos los hace mayordomos, los pagos que se imponen socialmente y los "diezmos" que pagan a sus grupos religiosos, siempre les causa sentimiento de perdida/o disminución.

Las personas que han sido investidas del poder del Espíritu Santo, son ungidas como hijos e hijas de Dios, luego de conocer la verdad sobre su "sentida independencia", como esclavitud en la que el esclavizador ejerce como dueño de su cuerpos y almas, engañando a los incautos haciéndoles creer que la acumulación, poca o mucha de "tierra", es fruto de su esfuerzo, siendo en verdad el distractivo con el que los mantiene en el estado natural de la muerte.

Filipenses 3: 18/21 Hay muchos que viven como si la muerte de Cristo en la cruz no sirviera de nada. Eso ya se lo había dicho a ustedes varias veces, pero ahora vuelvo a repetirlo con lágrimas en los ojos. Esa gente va a terminar en el infierno. Vive sólo para comer, y está orgullosa de lo que hace, cuando en realidad debería sentir vergüenza. Sólo piensa en las cosas malas de este mundo. Nosotros, en cambio, somos ciudadanos del cielo, y esperamos que de allí vuelva nuestro Salvador, el Señor Jesucristo. Nuestros débiles cuerpos serán destruidos, pero él los transformará en cuerpos gloriosos como el suyo. Esto lo hará con el mismo poder con que controla todo el universo. TLA.

Unos son los miles de seres humanos sociales y religiosos y otros son, los por cierto muy pocos cristianos; los seres humanos son administradores de sus organizaciones sociales y mayordomos de sus organizaciones religiosas, para las que ellos son la autoridad total. Los cristianos son personas que han conocido a su creador, fuente y poder creador de todo lo visible y de todo lo invisible, y son los mayordomos que administran cada minuto de Vida y cada centavo.

Cada minuto de vida que le pertenece a Dios y cada centavo-tierra-, que le pertenece a Dios, son mayordomos al servicio de su Padre, encargados de llevar adelante "los negocios del Padre", con la certeza reverente de rendir cuentas ante El, por cada minuto de Vida y cada centavo, que son la base del cumplimiento del propósito recibido de su Padre, cuyo cumplimiento es la forma como obedientemente cumplen la Voluntad de Dios. 

Cristo Jesús con su estilo de Vida es el perfecto y Unico ejemplo de lo que ha ser un administrador, es decir un mayordomo, los que creyeron en El y aceptaron su redención en la Sangre preciosa derramada en la cruz y la restauración de la vida en su resurrección, son los reveladores de ese mismo estilo de vida que es el estilo de vida cristiano.

Así que el que crea ser mayordomo parra Dios, ha de saber que mayordomía, es la forma como debe vivir el nuevo nacido dentro de la familia de Dios, que es la iglesia, como resultado del manejo de sus vidas y del dinero que son de propiedad de Dios, de modo que mayordomía es el principio operativo en que viven los cristianos que le dan forma a la iglesia que fundo Cristo Jesús.    

1 de Juan 2: 3/6 ¿Cómo podemos saber que conocemos a Dios? Si obedecemos sus mandamientos. Si alguno dice: «Yo conozco a Dios», pero no obedece sus mandamientos, miente y no dice la verdad. En cambio, el amor a Dios se demuestra cuando obedecemos lo que él manda. Así estamos seguros de que estamos unidos a Dios. El que afirma que está unido a Dios, debe vivir como Jesucristo vivió. NBD.

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