En el sendero o camino, ...

Romanos 8: 28/29 Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de los que lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos.  Pues Dios conoció a los suyos de antemano y los eligió para que llegaran a ser como su Hijo, a fin de que su Hijo fuera el hijo mayor de muchos hermanos.  NTV.

...que hemos recorrido, toma nombre, si la existencia ha sido placentera, exitosa y frecuentemente aplaudida y reseñada por la sociedad e incluso por la religión, o si al contrario hemos tenido dificultades, con mucha frecuencia dolor y frustración, y siempre ignorados por la sociedad e incluso por la religión. 

Cuando alguna luminaria del estrellato noticioso, entrevista a otra luminaria de cualquier actividad, siempre formula, a manera de "muletilla", esta pregunta: ¿Si usted pudiera cambiar alguna de las cosas que hizo, que decidió; cual seria?. La respuesta de la estrella; también a manera de "muletilla", es; no creo que cambiaría nada de lo que me ha ocurrido.

Nadie es capaz, ni tiene el poder para delinear senderos o caminos, a pesar de que muchos así lo creen, el Unico diseñador del camino que hemos recorrido,  ya sea que nos guste o no es El  Creador, dentro de su voluntad permisiva para los que El sabe que siempre lo rechazarán, y dentro de su Soberana voluntad para los que El sabe que conocerán su Amor.

Que asombrosa y confortante verdad, la que nos indica como,  lo que hoy somos y lo que seguramente seremos en los próximos minutos, fue "indispensable", como lo es el tercer ladrillo en la construcción que tendrá un millón de ellos. Pero que asombrosa y atemorizante verdad es la que nos indica que también ese tercer ladrillo, será indicativo del final de nuestra edificación fuera del Amor de Dios.

En esta verdad que solo es conocida en lo íntimo de la existencia humana, o en lo íntimo del corazón de los hijos de Dios, se sostendrá el profundo agradecimiento a Dios por haber permitido lo que ha sido nuestra vida y lo que será dentro su plan y propósito para ella; o el orgullo contumáz, que le da aliento a la idea de que somos los autores de lo que somos y lo que seremos.

2 de Timoteo 3: 11/13 Me has acompañado en las persecuciones y sufrimientos, como los que padecí en Antioquía, Iconio y Listra. ¡Cuántas persecuciones tuve que soportar! Pero de todas me libró el Señor.  Por lo demás, todos los que aspiren a llevar una vida cristiana auténticamente piadosa, sufrirán persecución.  En cuanto a los perversos y embaucadores, irán de mal en peor, engañando a los demás, pero siendo ellos los engañados.  BHTI.