Si te olvidas, ...

Deuteronomio 8: 19/20 »Pero una cosa te aseguro: si alguna vez te olvidas del Señor tu Dios y sigues a otros dioses, y les rindes culto y te inclinas ante ellos, sin duda serás destruido. Tal como el Señor destruyó a otras naciones en tu paso, así también tú serás destruido si te niegas a obedecer al Señor tu Dios. NTV.

... de quien eres y de quien Soy Yo, di El Señor, es porque has puesto tu mirada en la multitud de distractores que ha puesto Satanás, en el camino en el que has empezado a caminar, y no es el camino que Yo te mostré, para que andaras en el y así garantizar nuestra relación personal, nuestra comunión, nuestro amor.

Lucas 5: 27/28 Tiempo después, al salir de la ciudad, Jesús vio a un cobrador de impuestos llamado Leví sentado en su cabina de cobrador. «Sígueme y sé mi discípulo», le dijo Jesús. Entonces Leví se levantó, dejó todo y lo siguió. NTV.

El que caminaba con la gigante masa de seres humanos ocupandose en el cobro de impuestos, acepta seguir a Cristo Jesús; al hacerlo, queda atrás de inmediato el camino es decir el estilo de "vida" en que existía y comienza su comunión con Dios, establecida en su relación personal al con Cristo Jesús, que como su Señor, es el que lo guía y sostiene siempre.

Juan 13: 2, 21 Se habían puesto a cenar y el diablo había metido ya en la cabeza de Judas Iscariote, hijo de Simón, la idea de traicionar a Jesús. Después de decir esto, Jesús se sintió profundamente conmovido y declaró — Les aseguro que uno de ustedes va a traicionarme. BHTI.

No importa que tanto creamos que conocemos y que aceptamos a Cristo Jesús, e inclusive nos creamos parte de su cuerpo que es la iglesia, llegado el tiempo preciso, que es el tiempo de Dios, los que rebeldemente se niegan a obedecerlo, porque en la práctica están obedeciendo a "otro u otros dioses", recogerán la cosecha de su traición y serán destruidos.

Amos 9: 8/9 »Mis ojos están atentos y en contra de este reino pecador. ¡Voy a borrarlo de la faz de la tierra! Pero no destruiré del todo la casa de Jacob. —Palabra del Señor. »Voy a ordenar que la casa de Israel sea zarandeada entre todas las naciones, como se zarandea el grano en la criba, sin que caiga a tierra un solo grano. A filo de espada morirán todos los pecadores de mi pueblo, esos que dicen que el mal no se les acercará ni los alcanzará. RVC.

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