Impunidad

Salmo 7: 9 Pon fin a la maldad de los perversos, pero mantén firme al hombre honrado, pues tú eres un Dios justo que examina el corazón y la mente. RVC.
... palabra que redondea lo que representa la justicia humana al rededor del mundo; tribunales, cortes, jueces, fiscales, abogados, encabezan el sistema que consiste en "vencer" al acusado en juicio, para tener bases que permitan dictar sentencia y hacer justicia.
La verdad es que son pocos los sospechosos acusados que son "vencidos en juicio", independientemente de si son realmente culpables o no; los hechos y las evidencias, y las circunstancias manejados por cada quien, con la deliberada intención de ganarle al otro, deja en muy último lugar el delito.
Cuando el delito es subestimado en beneficio del ego y conveniencia de los actores del sistema de justicia, nace la impunidad y la verdad en la que hablar de cárceles y de llaves depende no de ser culpable o no de algún delito, sino de ser los que administran edificios y llaveros.
Es oportuno mencionar que la justicia es parte de las naciones y que forma parte de los sistemas político y religioso en que se fundamenta la sociedad, de modo que todo tiene que ver con hombres usando sus recursos y lo que llaman poder, para manejar las relaciones entre unos y otros.
Hebreos 4: 12/13 La palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que las espadas de dos filos, pues penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. Nada de lo que Dios creó puede esconderse de él, sino que todas las cosas quedan al desnudo y descubiertas a los ojos de aquel a quien tenemos que rendir cuentas. RVC.
No obstante la palabra impunidad no tiene significado ante Dios, queramos o no aceptarlo, El es la cabeza del único y legitimo tribunal de la perfecta justicia ante quien los magistrados, los jueces, los fiscales, los abogados, los acusados y todos los demás seres humanos rendiremos cuentas inexorablemente.
Solo los que entienden la obra de la cruz, en la que Cristo Jesús se hizo justicia ante Dios El Padre, por la humanidad que vivió impunemente ante los demás pecando preterintencionalmente para hacer daño, saben que la sangre derramada obró para perdón y que la nueva vida la viven en comunión con su Señor y Salvador ante quien son instrumentos de amor y justicia.
Galatas 6: 7 No se dejen engañar: nadie puede burlarse de la justicia de Dios. Siempre se cosecha lo que se siembra. NTV.

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