Epafrodito, ...

Filipenses 2: 25,29/30 Pero creí necesario enviarles a Epafrodito, mi hermano, colaborador y compañero de lucha, quien también es su mensajero y servidor (ministro) para mis necesidades. Recíbanlo, pues, en el Señor con todo gozo, y tengan en alta estima a los que son como él. Porque estuvo al borde de la muerte por la obra de Cristo, arriesgando su vida para completar lo que faltaba en el servicio de ustedes hacia mí. NBLH.

... mi hermano, mi colaborador, mi compañero de lucha, recibanlo con todo gozo y tengan en alta estima a los que son como el. Aquel ministro que nuestro hermano Pablo envía de vuelta a la iglesia de Filipos, la congregación que llena de amor por su entrañable hermano, líder y pastor encarcelado en Roma, le envío como prueba de amor y ayuda para sus necesidades, y apoyo en su tribulación.

Efafrodito, viajó de Filipos a Roma, para cumplir con la misión de ser parte de la obra que desarrollaba el apóstol Pablo, su obediencia y amor por El Señor que les había presentado Pablo, le llevó a estar al borde la muerte por la obra de Cristo Jesús, enfermando y arriesgando la vida en medio de la gravísima hostilidad del imperio romano contra los cristianos, y que había encarcelado a Pablo.

Sepan en Epafrodito lo que es de alta estima, para el progreso del Evangelio de Cristo Jesús, tenganlo en alta estima y hagan igual con los que son como el, los que han hecho el calculo del costo que implica "seguir obedientemente a Cristo Jesus", en el que la misma vida es tenida en baja estima por el privilegio de hacer conocer el plan de Amor del Padre Celestial.

Conforme a lo que Dios nos revela en su Palabra la Biblia, cada uno de los que han sido hechos parte de su familia en la obra redentora de su hijo unigénito y que han nacido de nuevo en su resurrección, han de "ser Epafroditos por fuerza de poder en su Señor", que siempre los guairá en cumplimiento de su Propósito de recuperar de la garras de las tinieblas a los que bagan por el mundo sin conocer a donde se dirigen.

2 de Corintios 11: 23/26 ¿Son servidores de Cristo ? Yo lo soy más todavía, aunque sea una locura decirlo. Yo he trabajado más que ellos, he estado preso más veces, me han azotado con látigos más que a ellos, y he estado más veces que ellos en peligro de muerte. Cinco veces las autoridades judías me han dado treinta y nueve azotes con un látigo. Tres veces las autoridades romanas me han golpeado con varas. Una vez me tiraron piedras. En tres ocasiones se hundió el barco en que yo viajaba. Una vez pasé una noche y un día en alta mar, hasta que me rescataron. He viajado mucho. He cruzado ríos arriesgando mi vida, he estado a punto de ser asaltado, me he visto en peligro entre la gente de mi pueblo y entre los extranjeros, en la ciudad y en el campo, en el mar y entre falsos hermanos de la iglesia . TLAD.

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