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Jeremias 9: 4/6 4 »Cuídense todos de sus amigos. Que no confíe nadie en su propio hermano. Porque todo hermano engaña descaradamente, y todo amigo esparce calumnias. 5 No hay nadie que no engañe a su amigo. No hay nadie que diga la verdad. Entrenaron su lengua para la mentira, y sólo saben perpetrar la maldad. 6 Viven en medio del engaño, y por su espíritu engañoso no han querido reconocerme.
—Palabra del Señor. RVC.
... ancestral, recesivo, cauterizado en la "corteza" que envuelve el alma-mente- es el odio razón de ser del carácter de la muerte, de la disposición "natural", para reproducir lo que "se es", porque lo que la gente hace "es" llevar a efecto la olimpiada permanente de la muerte, en los múltiples escenarios de pecado, sociales y religiosos, es así como tienen acceso permanente a su esparcimiento, a su recreativa manera de existir, como gladiadores comprados por el esclavo, para descargar todo su odio sobre ellos.
1 de Corintios 7: 21/24 21 ¿Fuiste llamado siendo esclavo? No te preocupes; pero si puedes hacerte libre, por supuesto procúralo. 22 Porque el que en el Señor es llamado siendo esclavo, es hombre libre del Señor. De igual manera, también el que es llamado siendo libre, es esclavo del Señor. 23 Por precio fueron comprados; no se hagan esclavos de los hombres. 24 Hermanos, que cada uno se quede para con Dios en la condición en que fue llamado. RVA-2015.
recurrente, en la forma perfecta de la reiterativo apreciable en cada acción de cada serf humano, sin que se requiera actividad "consciente" alguna, se trata de lo completamente normal de la conducta que ha sido desmejorada en el nivel de la descomposición que sufren los cuerpos muertos, es la norma en que se desarrolla la lucha intestina unos contra otros contra aquellos, cobijados maquinalmente por la sociedad y el sistema religioso, los alcahuetes del pecado, de la rebelión contra Dios.
Isaias 1: 21/24 21 ¡Ay, ciudad fiel! ¡Cómo te has prostituido! Antes residía en ti la justicia y el derecho, y ahora el asesinato. 22 Tu plata se convirtió en escoria; tu vino se mezcló con agua. 23 Tus príncipes son rebeldes y cómplices de ladrones; todos ellos aman el soborno y van tras las recompensas; no les hacen justicia a los huérfanos, ni les importa defender los derechos de las viudas. 24 Por lo tanto, así dice Dios, el Señor de los ejércitos, el Fuerte de Israel: «Voy a vengarme de mis enemigos; voy a desquitarme de mis adversarios. RVC.
En efecto de trata de consanguinidad entre seres humanos, eternamente ignorantes de su genuina herencia de genuina naturaleza, de su Inherencia con la Santidad, la Justicia el Amor rasgos Virtudes del Caracter del Creador y Dios y Padre de la humanidad, distantes abismalmente de su Presencia y Poder por la decisión heredada de los que cometieron el pecado imperdonable de desobedecerlo en el mas alto nivel de la traición, el adulterio espiritual que los sumió en la muerte eterna.
Juan 3: 4/7 4 —¿Qué quieres decir?—exclamó Nicodemo—. ¿Cómo puede un hombre mayor volver al vientre de su madre y nacer de nuevo? 5 Jesús le contestó: —Te digo la verdad, nadie puede entrar en el reino de Dios si no nace de agua y del Espíritu.[a] 6 El ser humano solo puede reproducir la vida humana, pero la vida espiritual nace del Espíritu Santo.[b] 7 Así que no te sorprendas cuando digo: “Tienen que nacer de nuevo”. NTV.
El mas grande anhelo de las criaturas hechas por la mano de Dios se convierte en negación, en rechazo en apostasía, buscando con tales argumentos, aliviar la ansiedad, el nudo en el estómago que presiente, que anticipa la rendición de cuentas, ante su presencia para responder por cada minuto y cada centavo que paso por sus existencias, y por sus manos, usados para cometer depravación, perversión corrupta contra la Justicia de Dios, que Obra por Amor, infalible como Santidad.
Lucas 11: 47/52 47 ¡Ay de ustedes, los que erigen los sepulcros de los profetas que mataron los antepasados de ustedes! 48 Con ello, no sólo son ustedes testigos sino cómplices de lo que hicieron sus antepasados, pues ellos los mataron y ustedes les erigen sus sepulcros. 49 Por eso, Dios en su sabiduría dijo: “Les enviaré profetas y apóstoles. De ellos, a unos matarán y a otros perseguirán.” 50 Por lo tanto, a la gente de esta generación se le demandará la sangre de todos los profetas, que desde la fundación del mundo ha sido derramada, 51 desde la sangre de Abel hasta la sangre de Zacarías, que murió entre el altar y el templo. Sí, les aseguro que será demandada de esta generación. 52 ¡Ay de ustedes, intérpretes de la ley! Porque se han apoderado de la llave del conocimiento, ¡y ni ustedes entraron, y a los que sí querían entrar se lo impidieron!» RVC.