Frente a la Cruz

Gálatas 2: 20
20 En realidad, también yo he muerto en la cruz, junto con Jesucristo. Y ya no soy yo el que vive, sino que es Jesucristo el que vive en mí. Y ahora vivo gracias a mi confianza en el Hijo de Dios, porque él me amó y quiso morir para salvarme. Biblia en lenguaje Sencillo

La gente, los seres humanos religiosos, solo pueden acercarse al monte de la calavera de manera geográfica, cuando lo hacen acuden por novelería, para ver el lugar en el que "un gran hombre", murió injustamente.

Pero hay otros, que al ser "tocados por el Espíritu de Dios", que ve en sus corazones, la disposición para el amor, son llevados al monte de la calavera, para que vean, el amor genuino colgando de la Cruz, ocupando su lugar. Son aquellos, que frente a la cruz, se ven muertos, junto con su Señor y Salvador Cristo Jesús, son los que enternecidos de amor, serán testigos del milagro, en el que Dios pagó por la vida de pecado de cada ser humano que nació, que nace y que nacerá.

Se trata de la obra que solo Dios podía realizar, en la que morimos a una vida antigua caracterizada por el pecado y nacemos, somos creados, por segunda vez, a una nueva vida personal, que obra en el carácter de Cristo Jesús.

Es la forma como termina la vida religiosa, en que los seres humanos existen, cargando con el peso de lo que no comprenden, llamado pecado y comienza la vida Cristiana, en la que cada hijo e hija de Dios, vivirá tomado de la mano de su amoroso padre, que lo guía en su hijo Jesucristo, por el poder del Espíritu Santo.


Romanos 6: 3/4 3¿Acaso no saben ustedes que todos los que fuimos bautizados para unirnos con Cristo Jesús, en realidad fuimos bautizados para participar en su muerte? 4Por tanto, mediante el bautismo fuimos sepultados con él en su muerte, a fin de que, así como Cristo *resucitó por el poder[a] del Padre, también nosotros llevemos una vida nueva. NVI

Cuál es el sistema de vida en que usted existe ahora?. El anhelante amor de Dios está disponible ahora y para siempre, únicamente para usted, es un Don, es un regalo, solo tiene que recibirlo, en la persona de Cristo Jesús, viniendo frente a la Cruz.


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