Que esperas de Dios?


Génesis 4: 19
19 Luego bendijo a Abram con estas palabras: « ¡Que el Dios altísimo, creador[a] del cielo y de la tierra, bendiga a Abram! NVI

Somos herederos de lo que la gente, que le da forma a la sociedad y la religión, han hecho por muchos miles de años. La conducta general de los seres humanos es la respuesta a las normas y reglas sociales y religiosas, al punto que la felicidad y la infelicidad, son conceptos que sostiene el orden social y que cuando las bases, en que se ha fundado tanto, lo uno como lo otro, no funcionan, le pasa el problema a la religión, para que lo solucione.

Cuando la sociedad agota sus recursos, entonces entra en escena la religión, para ofrecerle a la gente, soluciones que superan sus propias capacidades y las de la sociedad en general. Es cuando la gente escucha una palabra, que le es familiar, pero que en lo concreto, desconoce por completo; dios.

La palabra dios para la gente, que acude a la religión, representa algo similar a lo que son los superhéroes, dios es una especie de superhéroe, que les solucionara, todo aquello que los hace infelices y les garantizara, hacerlos felices por mucho tiempo. Este sistema muy antiguo religioso, funciona de manera similar a los comics o revista de historietas, en los que les ofrecen a sus lectores una gran variedad de héroes sobrenaturales.

Lo hacen muy bien, porque para darle el matiz religioso que esperan, no llaman a estos superhéroes de esa manera, sino que los llaman dioses y diosas. Es más, toman como base la Biblia y le enseñan a la gente que los personajes que aparecen en ella, son dioses y diosas.

Es algo similar a lo que la gente, hace cuando cree que dios es un rio en especial, o un árbol frondoso o un gato, o aún serpientes y muchas veces dragones, o las estrellas y los planetas, el aire en forma de fantasmas o los fenómenos naturales, como terremotos, huracanes, los volcanes y las aves, las vacas y los búfalos, de modo que si continuáramos, la lista sería casi interminable.

Sin embargo a pesar de la variedad de formas que acabamos de ojear, todo eso está enmarcado un una sola palabra; dios. Así las cosas, es fácil entender, que cuando la gente habla de dios, en realidad puede tener en su pensamiento, cualquier cosa de las que relacionamos anteriormente.

Y es entonces cuando nos tenemos que preguntar, ¿que conoce esa gente de lo que creen es dios y que esperan que eso que creen es dios haga por ellos? .Mejor dicho, ¿si están tan confundidos, acerca de lo que pudiera ser dios, como pueden no estarlo, respecto de lo que creen es felicidad e infelicidad?

Dios, es la identidad en la que la palabra toma forma, Es la persona, que anhela ser conocida por su creación, de la que somos su mejor parte, para que al conocerlo y conocer como es su carácter, aprendamos en verdad lo que es felicidad e infelicidad, como resultado de saber lo que son sus bendiciones.

Cuando esto ocurra, dejaremos de ser parte de una especie de subconsciente colectivo social y religioso y nos encontraremos por primera vez, con la capacidad personal, para darle forma a la palabra Dios. Conoceremos a Dios en Persona, al conocer a Cristo Jesús. Seremos capaces de establecer una relación personal con El, durante la que conoceremos su carácter y su capacidad amorosa para amarnos y cuidarnos.

Seremos liberados de las estrategias sociales y religiosas y comprenderemos que lo que antes creíamos era dios son solo las cosas que el creo para nuestro regocijo y disfrute, de manera que ira tomando forma en nosotros, un nuevo y genuino concepto sobre lo que es la felicidad y la infelicidad y de la misma manera, como Abram fue bendecido, seremos bendecidos uno por uno.

¿Cuánto tiempo más estarás esperando para, decidir ser libre, conocer a Dios y disfrutar de su amor? Juan 14: 6-10


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